Los fieles arribaron a la capital espiritual en familia y aseguran que este año será un reencuentro propicio con la virgencita de Caacupé.

Zunilda Ríos, una madre de familia que peregrina desde Asunción, afirmó que llegar a visitar a la Virgen de Caacupé es algo que llena de satisfacción. Señaló que se volvió tradicional para su familia hacer este recorrido y por eso lo hacen cada año. Indicó que su caminata es para agradecer a la virgencita por las bendiciones recibidas.

Lea más: Más de 5.000 policías trabajarán para garantizar la seguridad durante el operativo Caacupé 2022

Destacó que siempre que haya buena salud, la gente debe tener en cuenta la importancia de tomarse el tiempo para ser agradecido porque hubo momentos difíciles durante la pandemia. “Siempre recibimos la bendición y protección de nuestra madre y por eso procuramos venir en familia” expresó.

Agradecen por culminar sus estudios

El joven Fabricio Alcaraz llegó desde el centro de Asunción. Señaló que desde pequeño su madre le inculcó esta devoción a la Virgen, y por eso sigue con esa tradición. Manifestó que gracias a la Virgen de Caacupé él ha podido seguir sus estudios y culminar el año con buenas calificaciones.

Alcaraz mencionó que la Virgen de Caacupé siempre cumple y dijo que por esa razón realiza su caminata; la única vez que no pudo venir fue en la época de pandemia.

Asimismo, se mostró emocionado y dijo que es realmente una bendición que hoy en día se pueda volver y ya sin restricciones. “Siempre me encomiendo a la virgencita; ella es milagrosa y siempre me ayuda con mis exámenes”, insistió el joven.

Lea más: Pintan y decoran imágenes de la Virgen de Caacupé

Así también llegó Melisa Fretes, una joven oriunda de Lambaré, quien señaló que ella pidió a la Virgencita que la ayude a poder terminar bien sus estudios, ya que cursa la carrera de Psicología y sus exámenes fueron muy difíciles. ”La Virgencita me cumplió, pude terminar mis estudios y por eso estoy pagando mi promesa“, expresó.

La joven indicó que realizó su caminata desde Kurusu Pablito, con su familia. Resaltó que es muy importante tener fe, porque fortalece y ayuda a vivir con esperanza.

En la Villa Serrana también se pudo observar que muchos optan por peregrinar solos.

Fidel González, de Capiatá, exteriorizó su contento, porque después de dos años de pausa a causa de la pandemia, vuelve a realizar su peregrinación. Destacó que la Virgen de Caacupé siempre le brinda esa fuerza, de creer y de tener la fortaleza para salir adelante.

“Estamos muy felices de volver a Caacupé, y más aún después de una pandemia, hay mucho que agradecer”, aseveró.

Sin dudas la fe de los peregrinos crece y los visitantes lo demuestran con su fuerza y amor genuino hacia la protectora. Los devotos acuden a la ciudad desde distintos puntos del país e incluso del extranjero para demostrar su agradecimiento por las bendiciones recibidas.