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Unos ciudadanos se acercaron esta tarde a la casa del ministro Antonio Fretes, ubicada en el barrio Republicano de Asunción, para realizar un escrache y exigir su renuncia a la Corte Suprema de Justicia, donde actualmente es presidente con “permiso” para ausentarse.
Una de las manifestantes, Aidé Vera, dijo que se encuentran indignados ante la gravedad del caso que salpica al presidente de la Corte Suprema de Justicia al estar vinculado a un “escandaloso tráfico de influencias” por su hijo, Amílcar Fretes, quien habría cobrado una coima para evitar la extradición de Kassen Mohamad Hijazi.
Asimismo, Vera apuntó que “todos conocen las actividades” del clan Fretes y de ambos hijos del ministro, Asdrúbal y Amílcar Fretes, a quienes apuntó de que “hace años están involucrados en tráfico de influencias”.
Continuando con sus declaraciones, la abogada argumentó que es “insostenible” que el ministro siga al frente de la Corte Suprema de Justicia, ya que esto “afecta gravemente” al Poder Judicial.
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Escraches continuarán hasta que renuncie
Según Vera, los escraches frente a la casa de Fretes continuarán hasta que él llegue a presentar su renuncia al cargo de presidente de la CSJ y también apuntó que si los otros ministros de la Corte no se expresan “firmemente” sobre el caso del funcionario, ellos también estarían recibiendo escraches.
“Estamos atentos a los pronunciamientos de los otros ministros de la Corte y si no se pronuncian firmemente sobre la renuncia de este impresentable, también van a recibir sus castigos y las visitas de los escraches. Pasan a ser cómplices y es gravísimo, los ministros tienen que hacer que este impresentable renuncie”, enfatizó, instando a más ciudadanos a sumarse este escrache.
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