Cargando...
El doctor Jorge Rolón Luna dijo que aspira a la Fiscalía General porque en esta oportunidad ve que hay características diferentes en la elección, y tiene la impresión de que este será un “proceso más escrutado por los medios y la sociedad civil”.
Resaltó que hay parámetros establecidos y se avanzó en materia de transparencia, por lo tanto cree que “están dadas las condiciones de competitividad mínima”.
Con respecto a la polarización, y a que hay candidatos muy afines tanto a Mario Abdo Benítez como a Horacio Cartes, dijo que eso no le quita la posibilidad de llegar a la terna.
“Esa cuestión deriva de las candidaturas que se presentaron. Es natural que colaboradores cercanos al presidente se postulen pero el proceso es otra cosa. Ahí está el control y la mirada crítica de los medios, que va a jugar un papel muy importante”.
“Es posible competir”
Aunque hay candidaturas que responden a esta mirada y que a su vez son representantes de sectores, aún así cree que es posible competir con algún tipo de posibilidad. “No pierdo la esperanza. Hay queparticipar de esto. Una persona que tiene las condiciones y una obligación moral de presentarse y participar de estos procesos, no debe quedarse en la crítica y el plagueo de las redes sociales”, explicó.
“Obviamente uno puede pensar la cancha está inclinada y va a tener que pelearla más duramente que otro, pero confío en que esta ocasión se tendrán en cuenta otros criterios”.
Enfatizó que si en un momento dado la decisión política es poner a alguien honesto, “creo que tengo posibilidades”.
Aclaró que de llegar, no se prestará ni dejará impunes delitos graves que merecen persecución penal ni a perseguir a nadie. “El día que me elijan todas mis simpatías políticas van a quedar de lado. Los tratados internacionales que firmó el Paraguay, la ley orgánica, el Código Procesal Penal serán las normas de cabecera. Eso puede ser algo que juegue a favor en un país donde hay una polarización tremendaq”.
Con respecto al juicio contra la libertad de prensa, analizó que algunos parámetros básicos no estuvieron presentes a la hora de dar sentencias a las conductas de comunicadores y responsables de medios.