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Este jueves por la mañana tuvo lugar frente a la sede de la Caja Fiscal del Instituto de Previsión Social (IPS), en Asunción, una manifestación de miembros del sindicato de docentes Organización de Trabajadores de la Educación del Paraguay Auténtica (OTEP-A).
“Nos convocamos a hacer el reclamo respecto a las múltiples necesidades que tenemos como asegurados”, dijo una representante del gremio, Paola Giménez, quien consideró “una vergüenza” el nivel de atención del IPS a sus asegurados y las precariedades a los que estos se ven sometidos.
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“Nosotros mensualmente aportamos 5,5% de nuestro salario, pero no recibimos medicamentos ni atención adecuada a nuestra salud”, dijo por su parte Nery Arca, otro de los manifestantes. “Uno se va para consultar y no tienen ni Geniolito”, lamentó.
Giménez opinó que las autoridades del IPS “mínimamente” tienen que renunciar “por la nefasta gestión” y las sospechas de corrupción en su contra, y advirtió que los docentes se mantendrán “en permanente movilización y alerta” hasta que la previsional actúe en favor del “interés superior del asegurado”.
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Asegurados debe comprar sus medicamentos
Los asegurados que acuden al IPS para una consulta no solo deben lidiar con el inconveniente de agendar un turno, que generalmente se consigue para varios meses después en algunas especialidades, sino que además deben comprar los medicamentos recetados en las farmacias de plaza.
Fármacos para tratar enfermedades crónicas como cáncer, diabetes, asma, artritis y otros están en falta constante, denuncian cada semana los pacientes de la previsional.
Luis Ávila, secretario general de la Cámara de la Industria Química Farmacéutica del Paraguay, informó que la previsional tiene una deuda de US$ 242 millones por fármacos entregados, que a la fecha no fue saldada.