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Don Élido González presentó una denuncia en la fiscalía zonal de la ciudad de Gral. Díaz en la mañana de hoy por el robo de un motor de 15 HP de la marca Mariner color gris. Según relató, el hurto se produjo el domingo aproximadamente a las 15:00.
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Detalló que llegó a orillas del río Paraná en el puerto Tres Bocas, aproximadamente a las 13:00 del domingo. Como pensaba volver enseguida dejó el motor por la canoa, pero cuando regresó cerca de las 15:00 se encontró con la sorpresa de que el motor había sido robada.
“Me mutilaron, me sacaron mis pies y mis manos, porque es mi herramienta de trabajo. Apenas soy un humilde pescador, con esto se complica mi situación porque con la escasez de peces es difícil el momento que estamos atravesando”, se lamentó Élido González.
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Testigos vieron a dos personas merodeando
Agregó que no es la primera vez que ocurren hechos de robo en el puerto de Paso de Patria. Comentó hay testigos que dijeron haber visto a dos personas a bordo de un automóvil merodeando la costa del río el pasado domingo.
“Hubo personas que vieron a dos personas a bordo de un automóvil que estaban por la costa. Eran las únicas personas, por eso creemos que el motor fue llevado en un auto hacia Humaitá porque por el río no salió ninguna embarcación”, refirió.
El pescador anhela que la persona que se apropió del motor lo devuelva, ya que es una herramienta de trabajo muy importante para él y su familia. “Quiero que me devuelvan, es mi herramienta de trabajo, todavía ni siquiera pagué todo por el motor, saqué a cuotas y aún debo cinco cuotas por el motor”, señaló.
. “Pido que las autoridades policiales y fiscales hagan la investigación. Nosotros les seguimos a los sospechosos, llegamos hasta Humaitá, estando en la comisaría llegaron también estas personas sospechosas supuestamente a ponerse a disposición, pero la Policía no pudo hacer nada porque no tenían el motor en el auto”, explicó.
Escasez de peces
Los pescadores de la zona comentaron que también se encuentran preocupados por la escasez de peces en el río Paraná. Explicaron que debido a la bajante del río la población ictícola disminuyó. Resaltaron que apenas cinco a diez kilos de pescados logran sacar en un día de trabajo; un poco de boga y de bagres son las especies que capturan, según comentaron.
El dorado y el surubí, que son especies muy requeridas por los consumidores de la carne de pescado, hace tiempo no se encuentran. Esta situación hace que los pescadores de la zona de Ñeembucú no estén pasando por un buen momento económico.