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El proyecto de sincronización de las hidroeléctricas binacionales, Itaipú y Yacyretá y Acaray tiene un costo previsto de US$ 6.700.000, según lo acordado inicialmente, y es financiado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y Fondos de Contrapartida de la ANDE.
De acuerdo a los plazos que se manejaban inicialmente, dicha sincronía ya debió estar lista a mediados del 2020. Sin embargo, el entonces presidente de la ANDE, Ing. Luis Villordo, justificó el retraso en el cronograma de implementación del Esquema de Control de Contingencias de ANDE (ECCA), explicando que se vio afectado por las medidas sanitarias adoptadas en diferentes países a raíz de la pandemia.
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Fue mediante una nota a la Comisión de Entes Binacionales y Desarrollo del Sistema Eléctrico de la Cámara de Senadores.
En noviembre de 2020, al ser consultado sobre el estado de estos trabajos, el actual presidente de la estatal, Ing. Félix Sosa, respondió que debía entrar en servicio en diciembre de ese año o, como máximo, en enero del 2021.
Sin embargo, a pesar que agosto ya finalizando, la sincronización aún no es una realidad entre las hidroeléctricas.
Fallas en comunicación
El gerente técnico, Ing. Miguel Báez, explicó que todavía tienen algunos inconvenientes en el sistema. “Tengo pendiente hablar con Rieder para pedirle que el especialista venga, porque aparece un ruido en las comunicaciones, que necesitamos se solucione. El sistema está todo, pero la parte de comunicación parece muy frágil, cae a cada rato y necesitamos darle redundancia”, explicó.
Detalló que con frecuencia se corta la comunicación y que no saben explicar por qué. “Tiene que venir el especialista de Siemens a mirar. El técnico viene de Colombia, tiene trabajo en toda América Latina, y cuando su cronograma le permita, vendrá”, dijo.
Ya el mes pasado, el Ing. Báez había comentado que estaban esperando de la llegada del técnico de Siemens, que sigue sin venir.
“Es una lógica bastante compleja. Se tenía previsto meter un punto, pero tiene un montón de problemas en la implementación, porque no es fácil interconectar Argentina, Paraguay y Brasil. Se fueron levantando uno a uno todos los problemas que aparecieron, y ahora estamos en la última etapa ya, poca cosa es la que falta”, añadió.
El gerente técnico aclaró que la ANDE todavía no realizó la recepción final del proyecto.