Cargando...
Los tractores agrícolas de la marca John Deere, modelo 6403 de procedencia mexicana costó cada uno G. 405.207.350, totalizando la suma de G. 810.414.700. Igualmente fueron adquiridas, dos rastras aradoras de la marca Inroda de Brasil por la suma de G.85.291.000 cada equipo, las dos alcanzaron G.170.582.000. La suma total invertida fue de G. 980.996.700.
La compra se hizo mediante licitación pública y el único oferente fue Korusu y Cia. SA, fue pagada mediante fondo de royalties. Para la compra, los concejales municipales reprogramaron los fondos de royalties que corresponde a cuotas de los meses de julio, agosto, setiembre del año pasado, que el gobierno municipal anterior no recibió, unos G. 718.000.000 y el resto del dinero de royalties que recibió el gobierno actual, según explicaciones del concejal Ireneo Ortigoza.
Lea más: Ediles nepomucenos rechazan pedido de préstamos del intendente en pleno año electoral
Al principio, la administración municipal había solicitado autorización de la Junta Municipal para hacer un préstamo de G. 2.200.000.000, para la compra de las máquinas agrícolas y dos camiones tipo volquete, un retroexcavador a oruga. Pero los ediles consideraron inoportuno contraer una deuda y recomendaron la compra de los equipos con fondos provenientes de royalties.
Hay que tener un proyecto
El ingeniero agrónomo Fabio Vega aseguró que es siempre importante remover la tierra para convertir el suelo en una parcela mecanizada, pero en los años siguientes no se debe repetir la misma práctica.
Agregó que primero se tiene que realizar un análisis de suelo, para conocer que necesita, se debe implementar el cultivo directo y otros métodos recomendados. Vega dijo que un ejemplo de la práctica adecuada de producción se tiene en la compañía San Roque.
Vega, quien es un especialista en recuperación de suelo, dijo que no está ajeno a colaborar con el intendente Derlis Molinas (ANR-HC) en ese sentido y que inclusive podría tener una reunión con el jefe comunal para planificar los trabajos y elaborar un proyecto.
El profesional aseguró que si se plantea mal el proyecto, en vez de ayudar puede empobrecer el suelo y a los productores.
Muchos de los productores, quienes pidieron que no se publiquen sus nombres, indicaron que el temor es la politización de la ayuda municipal para rastronear las chacras.
Sin embargo, para el productor Marciano Vera, se están priorizando apoyo a los agricultores con fines electoralistas y están abandonado la ciudad y los caminos vecinales.
Al respecto, el intendente Derlis Molinas dijo durante el acto de entrega de las máquinas que los trabajos se realizarán por compañías y no será tenido en cuenta la afiliación de los productores. Estas máquinas pertenecen al pueblo, dijo.