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Monseñor Ricardo Valenzuela, expresó al inicio de su homilía que no debemos tener miedo de ser hombres y mujeres santos. “El espíritu santo nos regala alegría y la alegría es como la miel cuando lo untamos por el pan, por ello instó a no perder esa alegría de vivir la vida.
En otro pasaje de su homilía monseñor Valenzuela mencionó que hoy en día ya no sabemos que sucede con la gente porque vemos en las noticias robos y amenazas.
El obispo dijo que tenemos que fortalecer nuestra espiritualidad, y hacer conocer a nuestros niños a Cristo. A esto hemos sido llamados, a la santidad, Cristo es nuestra vocación, puntualizó el religioso.
Al finalizar bendijo a los jóvenes y niños que participaron de la eucaristía.
Posteriormente a las 9:00, se dió apertura al desfile cívico con la participación de más de 25 instituciones que desfilaron con orgullo y patriotismo.
Desfile estudiantil
Una gran cantidad de alumnos participaron con sus respectivos uniformes, así también vestidos de la época, otros participaron con los atuendos típicos paraguayos.
También se pudo visualizar a carismáticas niñas desfilando con el tradicional canasto de chipa, que es característico de Eusebio Ayala, y también hubieron alumnos que desfilaron con carteles que dejaban mensajes como: “A los niños no se golpean y a los niños no se toca”.
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Con una gran concurrencia de la comunidad y ciudades aledañas, también se presentaron invitados especiales que vienen de la compañía Mariscal López de la Escuela San José, de Piribebuy, ellos revieron pasajes de la guerra grande.
Durante la jornada se sintió la emoción y participación de la comunidad, pues el desfile lo realizan después de mucho tiempo y se pudo observar el entusiasmo de los estudiantes y espectadores, que acompañaron con calurosos aplausos.
