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La comunidad del barrio San Roque participaron de las actividades patronales que se desarrolló con el lema “Al instante se pusieron en camino para anunciar a Cristo”. La misa fue celebrada por el párroco Cirilo Martínez.
Para la fecha, el artista Martínez, había prometido a San Roque, hace un año en prepararle para su altar mayor y le recomendó la salud de su mamá y su suegra. Sin embargo, ambas personas fallecieron este año .”Mi mamá Eleuteria Martínez falleció en marzo pasado a los 75 años y su suegra Hilda Soraida Aguayo Viuda de Aguayo, hace nueve días también partió para la eternidad”, recordó acongojado el artista.
Sin embargo, el siguió con su promesa de terminar el altar “ mi sueño era mostrarles que un yaguaronino e hijo del barrio podía hacer una obra así”.
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Dijo que hizo el altar mayor en la capilla San Roque porque “vi que en el lugar faltaba un toque artístico, la parte central es la réplica del retablo de la parroquia San Buenaventura. Aquí utilizó 17 variedades de semillas y unos 30 kilos de legumbres.
Asimismo, el artista comentó que es un trabajo minucioso porque tiene muchos detalles ,una cosa es pintar y corregir y otra cosa es rellenar porque es muy delicado, pero cuando uno vive, lo siente y disfruta.
Agregó que el altar tiene además al santo patrono del municipio San Buenaventura, que también fue preparado con granos de la naturaleza. Los costados son trabajos artísticos, que se tiene dentro de la iglesia y eso se exterioriza en este trabajo artístico. Y la parte de la Virgen María, que explicó fue un trabajo mixto de aplique de semillas y pintura.
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Más de 50 kilos de diferentes variedades de legumbres
Explicó que para realizar el altar juntó más de 50 kilos de legumbres como poroto, garbanzos, feijao, lenteja, arroz, semillas de kuratu, sésamo, lino, semillas de trigo, maíz blanco, tupi, maíz pororó y varias otras variedades de semillas que fueron utilizadas para formar el altar.
Para la colocación del altar en la capilla, ayudaron para pegar las semillas sus hijos; Tobías, Anahí, Arturo y su esposa Silveria Palacios. Los granos donaron sus cuñadas Gloria, Hilda y Gladys y en el arreglo floral ayudó Pablo Salcedo, según comentó el artista.
Los presentes admiraron el trabajo realizado por el artista plástico, muchos se acercaron para observar el altar con más detenimiento.
Luego de la santa misa, los feligreses participaron de un almuerzo y en horas de la tarde prevén una merienda por el Día del niño.
