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Los agricultores de tomates, locotes y cebollas suelen registrar grandes pérdidas por el ingreso masivo de productos del extranjero. El contrabando causa la saturación del mercado nacional y los precios de la frutihorticultura nacional caen por debajo del costo de producción, lo que termina afectando a las familias de las zonas rurales del país.
El presidente del Consejo Nacional de Productores Frutihortícolas del Paraguay, Abel Brítez, comentó que tan solo este año se registraron tres casos de reincidencia de contrabandistas y otros cinco que fueron liberados con medidas sustitutivas que les permiten volver a operar tranquilamente con el contrabando. Aseguró que los contrabandistas son liberados sin informar a las instancias correspondientes y sin tener un comunicado oficial sobre los procedimientos realizados. Indicó que mientras que los autores del hecho no reciban un castigo duro de la Justicia, el flagelo continuará normalmente y las familias productoras serán los mas afectados de la situación.
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Comentó que ayer realizaron una denuncia en la Corte Suprema de Justicia, con el fin de que los fiscales y jueces que no cumplen con los castigos estipulados en la Ley, también sean castigados.
Por último, dijo que actualmente el tomate y locote están en un promedio de G. 4.500 a G. 5.000 en finca, situación que genera ganancias a los productores, pero que están preocupados por el aumento del contrabando de los mismos productos que puede nuevamente generar la saturación del mercado y hacer caer los precios la frutihorticultura nacional.