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Una familia se salvó de milagro en la mañana de hoy jueves en un accidente, gracias a que los ocupantes llevaban los cinturones puestos y el airbag se activó. El percance ocurrió cerca de las 08:00 sobre la Avenida San Antonio y Mcal López, en la entrada de la empresa granelera Sarcom.
El conductor de un tractocamión, en una maniobra imprudente, ocasionó el accidente, cuando realizó un giro a la izquierda para ingresar a la mencionada empresa y no respetó al vehículo de menor porte que circulaba por el carril correcto.
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Los vehículos involucrados fueron un camión de marca Scania, color rojo, con chapa HBD 073, guiado por Cipriano Cáceres Rodríguez (57), de Juan Manuel Frutos, y un auto de la marca Chevrolet, color blanco, con matricula HEA 936, al mando de Eduardo Javier Ayala Albertini Mieres (32), quien estaba acompañado de su pareja y su hija de 7 años.
El conductor del auto, indicó que circulaba hacia el sur y al llegar a la calle Mcal López, el enorme camión le salió al paso y ya no pudo frenar del todo para evitar el impacto y fue a chocar contra la parte lateral del tractocamión.
Los ocupantes del vehículo de menor porte resultaron con lesiones leves, gracias a que todos llevaban sus cinturones puestos y además el airbag se activó, todos fueron a un sanatorio privado para ser asistidos, pero el auto quedó con importantes daños y fue retirado en una grúa.
Los vecinos indicaron que los conductores de los camiones graneleros no respetan para girar y todos los días se genera caos en el lugar, debido a que la Municipalidad no destina personal de tránsito para dirigir.