Cargando...
Las tierras del señor Kazumi Nemoto están invadidas por supuestos campesinos sin tierra. El inmueble, de 150 hectáreas, se encuentra localizado en el área rural de Presidente Franco, Alto Paraná.
Los ocupantes están agrupados en la comisión vecinal Bertoni. Ante el atropello a una propiedad privada, el Indert resolvió retirar el reconocimiento de dicha comisión, según se puede leer en la resolución Nro. 3307/2021.
Los ocupantes optaron por crear una nueva comisión vecinal, esta vez llamada Bertoni Poty. Arsenio Solís es el presidente. El nuevo comité no cuenta con reconocimiento del Indert.
El atropello a la propiedad de Kazumi Nemoto comenzó a mediados de setiembre de 2020. Inicialmente fueron 20 carpitas, pero la inacción del Ministerio Público tuvo como resultado la ampliación del área invadida así como un mayor número de ocupantes ilegales.
Entre las fiscalas Denisse Duarte y Viviana Sánchez, de Presidente Franco, se culpan mutuamente de la inacción: la primera fue recusada y la segunda sigue con la carpeta fiscal en su poder, a pesar de la confirmación de Denisse Duarte en la investigación.
Ínterin en que las agentes del Ministerio Público debatían qué hacer, sin ponerse de acuerdo, el juzgado civil de Ciudad del Este ordenó que el legítimo propietario, Kazumi Nemoto recupere la posesión del inmueble.
La orden firmada por la jueza Nathalia del Rocío Moreno fue remitida a la Policía Nacional. El dictamen 11/2022, de la asesoría jurídica de la dirección departamental de la Policía, expresa: “Es parecer de esta asesoría jurídica que corresponde se designe personal policial suficiente a los efectos de otorgar acompañamiento al oficial de justicia encargado de dar cumplimiento al mandamiento de desalojo”.
Postura del Indert
Nuestro colega Enrique Vargas Peña, de Radio Cardinal, entrevistó a la presidenta del Indert, abogada Gail González Yaluff. Ella señaló que “el instituto agrario no admite la invasión de propiedades privadas. Vamos a reunirnos con la gente y estoy segura de que saldrán en forma pacífica cuando vean que no existe ningún excedente fiscal en el inmueble”.
Agregó que “los abogados del Indert van a ir hasta el lugar para entregar a los ocupantes el resultado del informe del título. Tienen que salir del inmueble, sí es propiedad privada”.
Por otro lado, la comisión de reforma agraria de la Cámara de Senadores también pidió informes sobre el título de propiedad de las tierras de Kazumi Nemoto, a instancias del senador Hugo Richer, del Frente Guasu.
El senador Richer visita con frecuencia el asentamiento y está considerado como el principal soporte político de los invasores, según expresan los mismos dirigentes.
Funcionarios públicos entre supuestos invasores
La dirigencia de los supuestos sin tierra está integrada de la siguiente forma: titular, Arsenio Solís Ruiz Díaz; vicepresidente, Isidro Alegre Rolón; tesorero, Tiburcio Gómez Vega; miembros, Gerardo Inchausti, Manuel Ozuna Salem, Mario Vera; los hermanos Isidro, Teodoro y Darío Alegre Rolón.
Entre los invasores se encuentran funcionarios públicos: Mario Vera, trabaja en la Municipalidad de Presidente Franco; Diosnel Sanabria Paredes, cumple funciones en el Ministerio de Salud Pública; y Ceferino Romero Martínez, docente en la escuela básica Nro. 7590 “San Blas”.
En el caso del presidente de la comisión, Arsenio Solís, según datos del Ministerio de Hacienda, está inscripto como pequeño empresario en la especialidad de informática. Su casa está ubicada en el Área 5, en las inmediaciones de la avenida Pilcomayo y Cordillera.
El tesorero, Tiburcio Gómez Vera, tiene su casa en el barrio Santa Ana, de Ciudad del Este; es asegurado del IPS y trabaja en la firma San Francisco Emprendimientos SA.
No faltan personas con antecedentes judiciales, comenzando por el mismo Arsenio Solís. De acuerdo a datos de la Policía Nacional tiene denuncias por violencia familiar e incumplimiento del deber legal alimentario. Lo mismo Teodoro Alegre Rolón, supuesto responsable de robo agravado, con prohibición de portar armas.
En el inmueble invadido se construyen viviendas precarias para justificar la ocupación, pero en realidad prácticamente todos los ocupantes tienen sus casas fuera de las tierras que pertenecen al señor Kazumi Nemoto.