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El documento fue presentado este jueves y enfatiza que ya es el décimo primer urgimiento que María Belén Whittingslow presenta a la sala penal de la Corte Suprema de Justicia. También, a que responda a la acción que fue planteada el 12 de agosto de 2019.
Según señala ni siquiera la sala fue conformada y se observa una excesiva demora.
En contacto con ABC, el abogado Juan Martín Barba señaló que su defendida siempre estuvo a disposición y quiere demostrar su inocencia. Agregó que una auditoría de la Corte declaró que la resolución de orden de captura de la jueza Lici Teresita Sánchez es ilegal, ilegítima y nula, pero que por ser un pronunciamiento administrativo no tiene la fuerza necesaria.
Expresó que la auditoría sugirió que por este fallo en contra de Whittingslow, la magistrada sea sometida al Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM) para analizar su decisión.
Supuesta represalia
Es lo que por lo menos afirma Barba, luego de un largo proceso de denuncia de acoso sexual a Whittingslow, de parte del que fuera miembro de Jurado de Enjuiciamiento y docente de la UCA, Cristian Kriskovich. En aquel juicio, recuerda Barba, el Tribunal había definido que hubo un “galanteo” hacia la denunciante y la causa fue desestimada.
Ante esto, creen que hubo una especie de vendetta y para que la denunciante se vea dañada, la involucraron entre varios estudiantes que fueron denunciados por supuesta compra de notas de exámenes.
Barba mencionó que existen elementos para defenderse pues hasta un profesor de Derecho Marítimo explicó que la estudiante ha rendido bien su prueba. El abogado lamenta que la Corte Suprema de Justicia actúe como abogada de la Universidad Católica.
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A esto se suma la orden detención que se dictó contra ella, por lo que decidió solicitar el exilio en Uruguay donde se encuentra por temor a que se cometa lo que asegura es una persecución.
Otros organismos internacionales al igual que Tecnología y Comunidad (TEDIC) o el Centro por la Justicia y el Derecho Internacional (CEJIL), se suman al reclamo a la Corte de nuestro país.
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Whittingslow tiene pruebas y la UCA teme enfrentar un juicio, afirmó
El abogado manifestó que esta casa de estudios pretende evitar el juicio oral y público. Remarcó que Whittingslow tiene elementos para demostrar que 160 alumnos de la UCA obtuvieron sus títulos, pero que son “mau” y comprados. Inclusive sostuvo que están ejerciendo la profesión.
Whittingslow es actualmente abogada y está matriculada ante la Corte Suprema de Justicia, pero culminó sus estudios en otra universidad que no es la UCA.
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