Monseñor Valenzuela defiende la verdad y pide que escuchemos “con los oídos del corazón”

A las 7:00 de este domingo se ofició la santa misa dominical con presencia de los fieles en la Basílica Santuario Nuestra Señora de los Milagros de Caacupé. La misa fue presidida por Monseñor Ricardo Valenzuela, quien durante su homilía mencionó que hoy celebran la Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales. A propósito de esta recordación, pidió a los fieles seguir el lema “escuchar con los oídos del corazón”.

Monseñor Ricardo Valenzuela, durante su homilía de este domingo en Caacupé.
Monseñor Ricardo Valenzuela, durante su homilía de este domingo en Caacupé.

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Durante su homilía, Monseñor Valenzuela indicó que debemos recibir al espíritu de la verdad: “Reciban la fuerza de lo alto, la fuerza del Espíritu Santo; el espíritu los introducirá en toda la verdad, que nos traerá la paz que tanto anhelamos”, aconsejó.

Así también habló sobre la importancia de la verdad, dijo que esta es “luz, guía, consuelo, remedio y alimento; nadie puede prescindir de la verdad”.

Agregó que necesitamos de la verdad para conservar la vida, prevenir enfermedades y ordenar nuestro peregrinaje por esta vida. “Cuánto tiempo perdido, cuántas desgracias, cuántos accidentes a causa de la ignorancia, de desconocer”, señaló.

Importancia del conocimiento de la verdad

“La verdad los hará libres, dijo Jesús. Por eso la inteligencia siempre busca instintivamente y no tiene reposo ni paz hasta que no se encuentre la verdad. Por ello debemos de entender que de la verdad dependen muchas cosas importantes en nuestra vida cotidiana, como la salud, la educación, el desarrollo de la personalidad, el bienestar y la conducta de los hombres”, continuó predicando el líder eclesiástico.

Resaltó que Dios quiere dos cosas interesantes: primero, que todos los hombres se salven, y segundo, que todos lleguen al conocimiento de la verdad. “Eso es lo que Dios quiere de nosotros, la salvación se propone como fin al conocimiento de la verdad”, afirmó.

El Obispo señaló que la oración es un medio de salvación, y añadió: “No conoce a Dios quien no obra rectamente”. En este sentido, aseguró que la verdad y el amor son fundamentales para el cristianismo y no debemos olvidarlos. Dijo: “Cristo mandó a la Iglesia predicar la verdad y proclamar la ley del amor”.

La verdad “hace mejores hombres”

También manifestó que decía San Pablo: “Abrazados a la verdad en todo, crezcamos en caridad ligándonos a aquel que es nuestra cabeza, Cristo”.

Pidió no olvidarnos de que la mentira es “un deformador de la verdad que produce innumerables males como la desorientación, imprudencias, desórdenes y enemistades. Mientras que de la verdad nace el diálogo, nace la paz, la felicidad y el verdadero progreso”. El obispo dijo que busquen la verdad no tanto para saber sino para hacer mejores a los hombres. Así también indicó que el corazón desempeña un papel importante en el conocimiento. “abre o cierra la puerta de la verdad” como lo dicen las sagradas escrituras.

La autoridad religiosa señaló que para llegar a la verdad hay que tener buena voluntad, porque nunca han dado resultados positivos los métodos violentos en el aprendizaje. Recalcó por algo “Jesús no quiso poner la fuerza bruta en el evangelio. Toda verdad tiene su origen y es Dios, porque Dios es amor”.

Autoridades “suelen oponerse a la verdad”

El obispo puso como ejemplo a la administración pública, y dijo que las autoridades suelen oponerse a la verdad en la investigación de hurtos, malversaciones de bienes, e incluso hacen declaraciones falsas. Afirmó que “algunas veces despreciamos la verdad o le cerramos los oídos por temor a que nos obliguen a abandonar ciertas comodidades”.

Finalizando, el obispo pidió a los fieles a que vayan siempre hacia la verdad. “Aunque esta sea amarga, no se conviertan en enemigo de quien la dice”. Pidió que supliquemos a la Virgen María “para que nos ayude a contemplar cada vez más de su resurrección de la verdadera vida”. “Recuerden, por el bautismo y la confirmación fuimos elegidos y constituidos para testimoniar la verdad. Si queremos ser un pueblo libre, basta de mentiras. Vayamos juntos en pos de la verdad”, puntualizó Valenzuela.

Con la concurrencia habitual de los fieles se desarrolló la santa misa dominical en la Basílica de Caacupé.
Con la concurrencia habitual de los fieles se desarrolló la santa misa dominical en la Basílica de Caacupé.
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