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Balmori Palma presta servicios en la comisaría 52ª Central de Ñu Guasu de Luque. Este uniformado fue quien intentó detener para una verificación el pasado viernes en horas de la mañana a Claudio Arnaldo Argüello Pizzani (21) y Elías Manuel Benítez Delgado (24), quienes minutos antes habrían sido los autores del homicidio de un albañil identificado como Juan Rafael Acosta González (38) frente a una obra en el barrio San Miguel de San Lorenzo.
Sin embargo, los presuntos homicidas — que fueron detenidos el sábado — dispararon al agente, quien sufrió graves daños en la zona del hígado.
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Balmori evoluciona favorablemente, según informó en conversación con ABC TV David Torales, director médico del Hospital de Policía Rigoberto Caballero.
“Él se encuentra evolucionando positivamente (…) tiene signos vitales estables. Está siempre en terapia intensiva, donde está siendo controlado permanentemente y todos sus controles (…) son bastante alentadores. Mañana (lunes) va a volver a quirófano para volver a revisar sus lesiones (…) si no hay complicaciones mañana se realiza el cierre del abdomen (…) A lo mejor en 24 a 48 horas más vamos a empezar el proceso de despertarle para sacarle de terapia”, informó el doctor Torales.
Sin embargo, el policía quedaría con secuelas de por vida, especialmente en lo relacionado a la alimentación y las mencionadas lesiones en el hígado. “Él no va a poder tener excesos con la alimentación. Después de cierto tiempo (de recuperación) puede continuar con sus funciones policiales”, añadió el director médico del hospital.
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Detenidos ayer
Argüello Pizzani y Benítez Delgado fueron capturados ayer, sábado, en Lambaré. Benítez — sindicado como quien disparó contra el albañil — sufrió un disparo en el pecho y otro en la cadera, lado izquierdo, durante el enfrentamiento con la Policía antes de su detención.
Ambos, supuestos adictos a drogas, fueron atrapados en las calles Defensa Nacional casi Independencia Nacional del barrio Cañada San Miguel de la ciudad de Lambaré. Se presume que el origen del conflicto entre el albañil fallecido y los capturados son las drogas.