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Como exigencia para formar parte del Mecanismo Covax, conformado supuestamente para garantizar equidad en la distribución de vacunas contra el covid-19, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) pidió al Paraguay un adelanto del 15% de la “prima de acceso”, que debía ser abonado antes del 9 de octubre de 2020. El 1 de octubre de ese año, con autorización del entonces ministro de Salud, Julio Mazzoleni, el Banco Nacional de Fomento transfirió de la cuenta del Ministerio de Salud a la cuenta de la OPS, en el Citibank en New York, G. 47.954 millones, o sea, US$ 6.847.680.
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El monto, que al ser “prima de acceso” constituye según el acuerdo firmado un dinero no reembolsable, debía garantizar que el país tenga acceso a 4.279.800 dosis anticovid.
Cuatro meses después, en febrero de 2021, el mecanismo Covax no cumplía aún su parte. Al país no había llegado todavía ni una sola vacuna por este medio. Incluso, el programa de inmunización contra el covid debió iniciar con dosis de Sputnik V compradas por fuera del mecanismo al Fondo Ruso de Inversión Directa.
Pero incluso cuando Covax no cumplía su parte del trato, y mientras la población protestaba por falta de medicamentos y camas en los hospitales, el gobierno de Mario Abdo Benítez insistió en liberar otros US$ 38.304.210 que la OPS exigía como “garantía financiera” y debían pagarse durante el 2021.
Fondos de Emergencia Covid
El pedido de los US$ 38 millones pasó por la Comisión Especial de Supervisión y Control de Compras Covid-19 (CESC), que el 23 de febrero de 2021 respondió a Mazzoleni con una “no objeción” al desembolso, incluso cuando, según la nota, “las autoridades del MSPBS (el Ministerio de Salud) no han expresado qué fondos serían utilizados para la transferencia requerida”.
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El plan era pagar US$ 2 millones en el primer y segundo trimestres de 2021 y otros US$ 35 millones en el tercer y cuarto trimestres. En la nota, los miembros de la CESC, legisladores y ministros, insisten a Salud Pública en la necesidad de transparentar el uso de los recursos públicos.
El 24 de febrero de 2021, Mazzoleni firmó la resolución por la que autorizaba el pago total de la garantía financiera, de US$ 38 millones, “con cargo a los Fondos de Emergencia Covid-19″.
Este dinero, sin embargo, no fue abonado finalmente. Mazzoleni renunció a su cargo a principios de marzo. Asumió en su reemplazo Julio Borba, quien aseveró que Covax modificó su proceso administrativo, que ahora indicaba que los pagos debían ser realizados a los proveedores. Con esta modalidad, Paraguay pagó por cada uno de los envíos de vacunas realizados mediante Covax.
Otros países fueron priorizados
Pese a que el Paraguay había enviado los US$ 6 millones de pago inicial, y ya estaba a punto de girar otros US$ 38 millones más, el mecanismo Covax, de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la Organización Mundial de la Salud (OMS), en el momento más álgido de la pandemia de covid-19 priorizó a otros países.
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El gobierno de Mario Abdo Benítez había abonado la entrega inicial el 1 de octubre de 2020, dentro del plazo exigido. El compromiso de Covax era entregar al Paraguay 4.279.800 vacunas. Sin embargo, recién el 19 de marzo de 2021 llegaron las primeras dosis mediante el mecanismo. Eran 36.000 AstraZeneca por las que se pagaron a la OPS otros US$ 158.000 más.
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La web de la OPS indica que el primer país al que llegaron fue Colombia, con 117.000 Pfizer, el 1 de marzo de ese año, mientras que el segundo país fue Perú, con otras 117.000 Pfizer, el 10 de marzo. Guatemala, El Salvador, Honduras, Jamaica, Nicaragua y Ecuador, fueron priorizados por los responsables de Covax que en total, hasta ahora, enviaron al Paraguay apenas 1.093.200 vacunas.