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Ayer, lunes, el Congreso derogó la Ley 6.900/2022 que autorizaba el subsidio a combustibles de Petropar, cumpliendo -de ese modo- con una exigencia del sector privado, que rechazaba dicha normativa porque consideraba que permitía una competencia desleal entre el sector privado y la petrolera estatal.
El vocero de Asociación de Propietarios y Operarios de Estaciones de Servicios y Afines (Apesa), Víctor Yambay, celebró esta mañana la derogación del subsidio, pues señaló que “se hizo justicia” con la decisión del Congreso.
“Creo que las autoridades enmendaron un gran error que habían hecho. La expectativa es que el mercado vuelva a su curso normal, con precios reales para que Petropar no venda por debajo de los precios”, agregó.
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Dejar de improvisar
Yambay señaló, asimismo, que esperan la promulgación de la ley que deroga el subsidio para seguir operando. “Lo que ansío es que termine esta historia, se promulgue la ley y a seguir trabajando. Fue una coyuntura. Lo que sí hay que sacar de experiencia es que hay que dejar de improvisar en Paraguay, formar grupos de trabajo y no apagar incendios cada rato, porque eso nos lleva a tomar mala decisión”, sostuvo.
En ese sentido, cuestionó que hasta el momento no hayan sido convocados para ser parte de una mesa de trabajo con el Gobierno. “Lo que pasa es que nunca le llaman a los involucrados para sacar una ley”, declaró.
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Afirmó que “el sector privado es el primero que se ofrece a buscar una solución a la crisis”.
El representante de Apesa, en otro momento, indicó que “hay que dejar de satanizar al sector privado” porque -afirmó- la crisis de la alza de precios de los combustibles deriva de una situación internacional.
Perjuicios económicos
Por otra parte, Yambay comentó que, de acuerdo a los registros de las 15 estaciones que maneja, alrededor de G. 2.500 millones son descalce que percibió de forma particular en los últimos 15 días por el subsidio a Petropar. “Bajamos a niveles de venta de 20%”, refirió.
Indicó que dicho perjuicio económico derivó incluso en el despido del personal. Añadió que en algunos casos tuvieron que recurrir a aplicar vacaciones o solicitar suspensiones de contrato para “no perder la fuerza laboral”.
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Protestas en zona de Petropar
Los trabajadores que forman parte del sector privado desde ayer se encuentran protestando contra el subsidio a Petropar.
Algunos camiones de Apesa y otros gremios incluso hasta hoy, martes, siguen apostados en inmediaciones de la planta de la petrolera estatal, ubicada en Villa Elisa, a la espera de la promulgación de la ley que deroga la subvención.