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Bastante tajante y con abogado de por medio, el presidente de la compañía que administra energía eléctrica en la ciudad de Villarrica, Clyfsa, ingeniero Luis María Ocampos, envió un telegrama colacionado al presidente de la Administración Nacional de Electricidad (ANDE) ingeniero Félix Sosa, en el que le advierte que la ANDE no puede atribuirse la potestad de limitar el suministro energético a 80.000 personas que utilizan la provisión de Clyfsa, sin justificación técnica alguna.
Esta advertencia se da a raíz de que el gerente técnico de Clyfsa, Eder Paredes, recibió un mensaje a través de la aplicación Whatsapp en el que le avisan que el ingeniero Pedro Orué, encargado del Depacho de Cargas de la ANDE comenta que en la tarde de este jueves regularán el relé de 36 MW a 32 MW.
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Disminución arbitraria
Según el representante de Clyfsa, esta disminución es sin motivo técnico alguno, debido a que no existe un pico de demanda pues nos encontramos en pleno otoño.
En el colacionado, Luis María Ocampos le advierte a Félix Sosa que la ANDE no puede atribuirse la potestad de “cortar y limitar el suministro de 80.000 personas incluyendo hospitales, centros de salud, comercios, industrias, oficinas gubernamentales, poder judicial, etc.”.
Le recordó que la pérdida financiera que se dará es grande y es atribuible a la acción que pretende la ANDE.
El titular de Clyfsa advierte al de la ANDE que de ser cierta esta intención de disminución arbitraria de 36 MW a 32 MW, esto conllevaría “un perjuicio enorme”, a la provisión de energía en la ciudad de Villarrica, “e incluso conllevaría a la muerte de personas en los sanatorios médicos”, pues también se verá afectada la provisión de energía en los hospitales.
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Atento recordatorio
En otro párrafo, el presidente de Clyfsa le recordó atentamente al presidente de la ANDE que Clyfsa tiene una orden judicial en la sentencia definitiva 106 del 28 de octubre de 2021 que textualmente ordena a la ANDE que asegure el suministro de potencia requerida por Clyfsa para Villarrica y que no puede limitar la potencia que esta ciudad requiere.
En un último párrafo bastante contundente, Luis María Ocampos hace responsable a la ANDE y sus representantes por los daños que ocasionen sus acciones que atentan directamente contra el derecho constitucional de los ciudadanos al libre acceso a los servicios públicos.