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“Estamos entrando en la época ideal u óptima de siembra de canola, que es a partir de mediados de abril, todo el mes de mayo y hasta primera quincena de junio, para variedades sintéticas de polinización abierta, como es la Yellow Sea. Debemos tener en cuenta que la implantación es la fase más delicada del cultivo, que en general los índices o coeficientes de implantación son bajos en este cultivo”, empezó diciendo el gerente comercial de Granar Saeca.
Una canola todoterreno
El ingeniero Soler explicó. “Hemos desarrollado esta variedad nacional que ha demostrado una excelente adaptación y una gran confiabilidad en cuanto a producción, por ser una variedad sintética de polinización abierta, desarrollada y adaptada a suelos moderados con una acidez de pH5 y presencia de aluminio, es casi un cultivo todoterreno”.
Comportamiento ante heladas en campaña 2021
“En la campaña pasada (2021), el comportamiento de Yellow Sea fue bueno y estable, a pesar incluso de golpes por estrés térmicos (heladas), y que quizás es la característica más sobresaliente en este material, la rusticidad y estabilidad. El año pasado se sembraron 11.000 hectáreas en Paraguay, y a la fecha ya estamos en 15.000 hectáreas y se van sumando más, confiamos en que se podrían superar las 20.000 hectáreas. Destacando el comportamiento de esta variedad nacional, en su primer año comercial en Uruguay pasó las 10.000 hectáreas de siembra, y los productores tienen muy en cuenta en cada zafra la genética guaraní de Granar Saeca; para darte un ejemplo, todavía ocupa más del 20 por ciento del área con materiales de la vieja genética, y la llegada de Yellow Sea se esperaba y el productor uruguayo está acompañando, al igual que en Paraguay”, explicó el directivo de Granar.
Fertilización, estabilidad y rendimiento
“En lo referente a la fertilización, podemos decir que se recomienda una fertilización de base moderada (no demasiado exigente), y con un complemento de fertilización foliar es suficiente para alcanzar excelentes rindes como en la campaña pasada (2.400 kg/ha en mejores suelos y condiciones). Y cuando tocamos el tema estabilidad, hablamos de rindes que se mantienen, por sobre la media del cultivo, a pesar de las condiciones ambientales, dando sustentabilidad al sistema agrícola, por eso son tan requeridos este tipo de materiales en estas latitudes”, destacó el ingeniero Soler.
Un cultivo de comercialización y precio seguro
A la pregunta de si el productor que apueste a la producción de canola este año, tiene asegurada su comercialización, nuestro entrevistado dijo.
“Los valores y la comercialización de la canola son la otra pata que complementa en realidad el negocio, en Uruguay, recuerdo en los años 2010 y 2011 tuve la oportunidad de viajar allá a explicar el fenómeno canola paraguaya, cuando habíamos pasado las 70.000 a 80.000 hectáreas en el país, y Uruguay estaba en 30.000 hectáreas; hoy se invirtió la ecuación y los uruguayos están por sobre las 150.000 hectáreas, y nosotros estamos manteniendo las 60.000 a 70.000 hectáreas, y esa diferencia la marca el ingreso de nuevos jugadores, tanto en genética como en la comercialización. Como siempre, me despido con los mejores augurios para la campaña de invierno, y que podamos tener una zafriña, tanto en maíz como en soja buena, ya que el golpe de la mala zafra, realmente complicó el escenario productivo, con pérdidas de más del 50% de la producción nacional”, finalizó.