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La joven madre Karen Maciel, de 29 años, resultó muerta tras ser arrollada por un automóvil conducido por Lucio Javier Barrios, el pasado 14 de febrero en la compañía Capilla Cue de Piribebuy, según consta en el acta policial del procedimiento. Sin embargo, pese a que sus familiares la estaban buscando desde el 9 de febrero, la fiscala Zulma Benítez, de Caacupé, ordenó su inhumación y entierro en una fosa común porque -alegó- no logró contactar a sus cercanos.
El encargado de la morgue judicial, doctor Pablo Lemir, refirió que su colega Adolfo Chirife fue quien intervino el cuerpo de Karen.
Asimismo, explicó el procedimiento y señaló que el Código Sanitario dispone que un cadáver debe ser inhumado y enterrado dentro de un plazo de entre 12 y 36 horas. Sin embargo, aclaró que esta normativa es “estirada como chicle” para que familiares puedan contar con mayor tiempo de reclamo del cuerpo, considerando -indicó- que la legislación no se adecua a la realidad por su “deficiencia”.
Igualmente, comentó que “por una deficiencia del Estado” esta prolongación del plazo no puede ser ejecutada en algunas ocasiones debido a que cuentan con una sola morgue judicial que tiene una cámara frigorífica que sirve para almacenar nueve cuerpos.
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Fiscala Zulma Benítez tuvo tiempo para contactar
Lemir señaló que, en ese sentido, solicitan a los fiscales en caso de “una muerte violenta” la inhumación del cuerpo tras un plazo de 10 días de almacenamiento en la morgue, a fin de vaciar la cámara frigorífica para el ingreso de otros cadáveres.
Sobre el caso de Karen, refirió que el cuerpo de la joven madre estuvo en la morgue entre 10 y 15 días, período en el cual la fiscala pudo haber contactado a sus familiares, atendiendo a que la identificación de la fallecida fue referida en el acta policial del accidente que fue remitida al Ministerio Público.
Acotó que, incluso, la fiscala Benítez comunicó a los forenses de la identidad del cuerpo, confirmando de ese modo que la agente contaba con los datos para contactar a los familiares de Karen.
“Tendría que revisar mis libros, pero sería entre 10 y 15 días (permanencia del cuerpo de Karen en la morgue). La fiscala dio la orden de inhumar. Ellos nos comunican la identificación”, sostuvo.
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Enterrada en una fosa común
El cuerpo de la joven madre fue a parar a una fosa común dentro del Cementerio del Este y, de acuerdo a las imágenes compartidas por su familia, se observa que fue enterrada en un precario espacio.
El médico forense indicó que los cuerpos no identificados son inhumados y posteriormente enterrados en un espacio concedido por la Municipalidad de Asunción para la fosa común y que está ubicado dentro del mencionado cementerio. Añadió que estos cadáveres cuentan con un código numérico y son colocados bajo tierra mediante un sistema de mapeo para que, en caso de un posterior reclamo de familiares, sean ubicados con precisión.
En cuanto al caso particular, manifestó que Karen fue enterrada en dicho espacio debido a que “está colapsado el Cementerio del Este y esa es una deficiencia del Estado”.
La familia de la joven mencionó a ABC que el desentierro del cuerpo está fijado para este lunes y su objetivo es darle una sepultura digna que había sido negada por la presunta irregularidad de la fiscala Benítez, quien tampoco imputó al responsable, por lo que fue apartada del caso y cuya intervención será auditada por orden del Ministerio Público.