UGP pide “economía de guerra” y condiciones para seguir trabajando

A pesar de que Paraguay no está en la línea de tiro en el conflicto bélico, el sector productivo está peleando una suerte de guerra, porque está recibiendo bombas en su economía. “Debemos ajustarnos los cinturones, el Gobierno debe idear las condiciones para que la gente salga adelante trabajando, porque si se sube el combustible cada ocho días y sigue habiendo privilegios para algunos, la tensión social continuará”, advirtió el presidente de la Unión de Gremios de la Producción (UGP), Ing. Agr. Héctor Cristaldo.

Cierre de ruta en Caaguazú, en la ruta PY02, en el km 170.
Cierre de ruta en Caaguazú, en la ruta PY02, en el km 170.

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Mientras la clase política de nuestro país siga concentrada principalmente en las elecciones de 2023, en vez de ocuparse de cosas urgentes, la sociedad irá de mal en peor, manifestó el titular de UGP. Las señales del mundo muestran que deberíamos cambiar el rumbo, transformar nuestra matriz energética y dejar de depender de los combustibles fósiles. “En tiempos difíciles, lo que queda es tener una economía de guerra, una mayor previsibilidad para que el paraguayo trabajador no viva en la incertidumbre”, expresó.

Calificó de casi desesperante la situación y comentó que por eso la UGP emitió un comunicado para que se eliminen los privilegios y subsidios que tienen muchos funcionarios, porque los paros continuarán y dio a entender que, eventualmente, el sector productivo se plegaría con sus tractores en las calles para incrementar la medida de fuerza.

Eliminar ISC y negar cualquier tipo de subsidio

Desde la última reforma impositiva que golpeó fuertemente el bolsillo del trabajador del campo, seguimos esperando que el Estado cumpla con su compromiso de racionalizar el gasto público, para disminuir el peso de la carga tributaria expuesta sobre la espalda del contribuyente, expresa el comunicado de de la Coordinadora Agrícola del Paraguay (CAPy), difundido por la UGP.

“Seguimos sintiendo el impacto de la mayor sequía de los últimos años, que causó la mayor frustración de la producción agrícola del país, aún sin salir de esta situación ya nos toca sentir el impacto de los últimos ajustes en los precios de los combustibles, situación que golpea profundamente el bolsillo de todos los paraguayos”, señala el manifiesto.

Añade que la CAPy rechaza rotundamente el uso de cualquier tipo de subsidio hacia los combustibles a fin de mantener o bajar su precio. “Desde la Coordinadora Agrícola del Paraguay exigimos la eliminación definitiva del Impuesto Selectivo al Consumo (ISC). Por tratarse de un impuesto que no genera transparencia, confianza y que tiene un efecto directo en el precio final del combustible, de esta manera afectando el precio de la canasta familiar básica”, propone el gremio.

En ese sentido, la CAPy insta al gobierno a fomentar la investigación y el desarrollo de tecnologías capaces de aprovechar los recursos energéticos renovables que disponemos para la optimización del transporte de mercancías, pasajeros y movilidad de la ciudadanía en general.

También refiere que de esa forma nuestro país podrá salir de la dependencia de los combustibles fósiles que tienen variaciones de precios constantes, como consecuencia de la volatilidad de la cotización del crudo en el mercado internacional.

Sin embargo, admite que en los momentos difíciles se requiere de mucha prudencia y previsibilidad para conducir a un diagnóstico correcto de la situación; también, que hace falta una gestión eficiente y la conducción firme de las políticas públicas, a fin de utilizar mecanismos que permitan trabajar en paz para reconstruir nuestra economía con la mayor certidumbre posible, finaliza el mensaje de la Coordinadora Agrícola del Paraguay.

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