Brucelosis sigue causando pérdidas

La brucelosis es producida por una bacteria, Cocobacilo gram negativa, denominada Brucella abortus, y se caracteriza por generar abortos en las vacas. El médico veterinario Nicolás Palacio explica las pérdidas que sufre el productor que no realiza las vacunaciones contra este mal.

Existen dos muy buenas vacunas con ya muchos años en el mercado, la vacuna con la Cepa 19 y la vacuna con la cepa RB51, ambas muy efectivas y que ayudan a controlar el problema.
Existen dos muy buenas vacunas con ya muchos años en el mercado, la vacuna con la Cepa 19 y la vacuna con la cepa RB51, ambas muy efectivas y que ayudan a controlar el problema.GENTILEZA

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“La brucelosis, una enfermedad incurable, se caracteriza por generar abortos en vacas durante el último tercio de gestación, nacimiento de terneros prematuros, débiles o natimortos, retención de placenta e infertilidad; siendo subclínica o con cuadros de orquitis y/o seminovesiculitis en toros. Además de estos cuadros producidos en los bovinos, es una de las infecciones zoonóticas de mayor distribución en el mundo, esta enfermedad puede llegar a producir pedidas de hasta un 5 por ciento de concepción en rodeos infectados, si bien este numero no parece mucho, hay que sumar a estas pérdidas la eliminación de vientres positivos, reposición precoz, perdidas en la producción de leche, perdidas en tambos por la eliminación de vacas”, explico Palacio, coordinador de servicios del Centro de Diagnostico Veterinario (CDV).

Principal fuente de diseminación

En lo referente a cómo se disemina la bacteria el veterinario explicó. “La principal fuente de infección es la vaca que ha abortado, ya que deja en el ambiente millones de bacterias con el feto, placenta, fluidos fetales, loquios y flujo vaginal. Un feto abortado tiene un potencial de infección para 60.000 a 600.000 vacas preñadas susceptibles no vacunadas”.

Una vaca infectada, infectará a otras toda su vida

Médico veterinario, Nicolás Palacio, de CDV.
Médico veterinario, Nicolás Palacio, de CDV.

“Una vez que el animal se infecta se transforma en un portador de por vida. Si la vaca se infecta al inicio de la preñez, puede tener un parto a término, infectante, con un ternero que suele nacer débil y que suele morir en los primeros días de vida por la susceptibilidad a otras infecciones. Si la infección ocurre en la mitad de la gestación, hay un periodo de incubación de 1,5 a 2 meses y el aborto ocurre sobre el séptimo mes de gestación”, explicó.

“Los terneros por lo general no adquieren la enfermedad durante los primeros meses de vida por la inmunidad calostral y por la inmadurez de los órganos genitales que dificulta la colonización de la brucella. La mejor estrategia sanitaria radica en la eliminación de los animales positivos y en la vacunación de los animales susceptibles en tiempo y forma”, confirmo nuestro entrevistado.

Vacunación y control del problema

“Con respecto a la vacunación para el control del problema, existen dos muy buenas vacunas con ya muchos años en el mercado, la vacuna con la Cepa 19 y la vacuna con la cepa RB51, tanto la vacuna con cepa lisa como la rugosa generan muy buena inmunidad y son muy seguras. Se recomienda que los campos inicien la vacunación con cepa 19, por su gran inmunogenicidad, en animales de entre 3 a 8 meses de edad, y según corresponda por plan nacional o bien en zonas con problemas reformar la inmunidad con cepa RB51. El CDV, es un laboratorio argentino con más de 35 años en el mercado veterinario, especializado en el diagnóstico y la producción de vacunas para bovinos y otras especies, y dentro de los productos elaboramos las vacunas contra la brucelosis, CDVac Brucelosis cepa C19 y CDVac Brucelosis cepa RB51, como herramientas preventivas de la brucelosis bovina”, finalizó el médico veterinario Nicolás Palacio.

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