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El Ministerio Público prosigue con la investigación del asesinato de Fátima Rejala Cabrera, una mujer que supuestamente trabajaba para el clan Insfrán. Ayer, con la detención de uno de los supuestos autores del crimen, Wilson Adán Pereira Suárez, hubo un gran avance en las investigaciones, según manifestaron los fiscales.
“La linea investigativa se fue fortaleciendo al recabar datos de fuente humana, recolectar datos de circuitos cerrados y evidencias físicas que nos permiten construir una hipótesis”, dijo el fiscal Marcelo Pecci.
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Aún no se conoce el motivo del asesinato
Por su parte, la fiscala Karina Chaparro indicó que el motivo por el que la mujer fue ultimada aún se desconoce pero tienen la circunstancia de haber individualizado a una persona. “En cuanto a hipótesis se podría hablar sobre la familia Insfrán. No se descarta nada”, acotó.
En el mismo contexto, Pecci manifestó que conclusivamente no pueden asegurar que la muerte de la mujer esté relacionada a la familia Insfrán y las investigaciones en el marco del operativo “A ultranza”, pero hay elementos -como propiedades y otros- que vinculan a la fallecida con el clan que presuntamente se dedicaba al narcotráfico y lavado de dinero.
“Son líneas de investigación que están abiertas. Podemos presumir que evidentemente hubo una desaprobación hacia alguna situación que involucra a la víctima fatal, lo cual de manera alguna significa que ella haya actuado mal”, expresó.
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No se descarta un “mal sentido de deslealtad”
Igualmente, comentó que la gente que ejecuta este tipo de hechos con desaprobaciones puede llegar a extremos como tales. “Supuestamente hubo una fuga de información que pudo haber dado la persona, un mal sentido de deslealtad”, subrayó.
Los fiscales hicieron hincapié que la vinculación de Rejala con la familia Insfrán aún está siendo verificada y que no pueden confirmar ni descartar ninguna hipótesis.
Resaltaron que hasta el momento no tienen información que confirme que la mujer trabajaba para la familia Insfrán pero que están verificando los datos. No obstante, comentaron que tienen indicios de que sí era empleada de la familia.