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“Recibí una amenaza telefónica de que tenían audios míos, de los años anteriores, es decir, mi teléfono se estaba controlando antes de yo sea diputada”, comenzó diciendo ante el pleno la diputada Amarrilla.
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Incluso, individualizó al presunto responsable, que sería el jefe de la oficina de Inteligencia Estratégica de la Senad.
“El que graba las comunicaciones de los paraguayos y paraguayas se llama Cristian Amarilla, es un funcionario de la Senad y vende nuestra conversaciones al mejor postor, en este momento la oferta es al cartismo”, insistió.
La diputada Amarilla, una de las que más abiertamente se enfrenta al movimiento Honor Colorado y su líder, Horacio Cartes, dijo que justamente es ese sector el que estaría detrás de una eventual divulgación de los audios.
“Lo que pueda pasar hago público desde ya, que cualquier audio que saquen a partir de ahora con mis conversaciones son ilegales y posiblemente retocadas e inventadas. Pero señor Cartes, puede comprarle a toda la Senad o a Amarilla, que seguramente es barato, pero no me voy a callar. Usted es un mafioso, usted es un narcotraficante y un contrabandista de cigarrillos”, afirmó.
Dio a entender que los audios en cuestión se tratarían de su actividad anterior, que era la venta de almuerzo escolar, aunque no dio mayores detalles.
“Yo vendía merienda escolar, pero ustedes venden droga. Cristina Villalba, su esposo planta marihuana en propiedades arrendadas. ¿De dónde “Bachi” Núñez sacó un astillero? ¿Cómo su hija de 20 años tiene un barco? Porque vació Opaci, o por el dinero de Cartes”, disparó.
Agregó que no es la primera vez que recibe amenazas, no solo de muerte, y dijo finalmente: “Al directora de la Senad (Zully Rolón) le exijo explicaciones y quiero la cabeza de Cristian Amarilla”, dijo.