Pobladores de Aguapety exigen cierre total de arroceras

CORONEL OVIEDO. Pobladores de la Colonia Aguapety de esta ciudad fueron ayer hasta la Cámara de Senadores con el fin de solicitar que las dos arroceras ubicadas en el distrito de Dr. Botrell, departamento de Guairá, cesen totalmente el bombeo de agua del arroyo Aguapety. El cauce hídrico divide los departamentos de Caaguazú y Guairá y representa uno de los afluentes más importantes de río Tebicuarymí.

Momento en que autoridades del MADES intervinieron las arroceras.
Momento en que autoridades del MADES intervinieron las arroceras.

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Los pobladores de la Colonia Aguapety se reunieron ayer con el presidente de la Comisión de Energía, Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Cámara de Senadores, Sixto Pereira (Tekojoja), y representantes del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible (Mades), con el fin de tratar la problemática que se viene arrastrando sobre las dos arroceras de 300 y 700 hectáreas pertenecientes a Rodolfo Méndez y Javier Chaliol, respectivamente, quienes desde sus inicios vienen bombeando agua del cauce hídrico en cuestión.

Los lugareños denunciaron que ambas arroceras no están respetando la prohibición de extraer agua del afluente del Arroyo Aguapety y que siguen atentando contra la fauna y flora que rodea al cauce hídrico.

El representante de los pobladores, Juan Torales, aseguró que ambas arroceras están violando las disposiciones del Mades y que pese no contar con autorizaciones, están bombeando agua de manera discriminada del arroyo que cruza por la zona. Aseguró que pese a que la afluencia de agua aumentó por las últimas lluvias, aún no es suficiente para extracción. Indicó que, por tal motivo, exigen que ambos cultivos sean clausurados totalmente.

Añadió que las autoridades nacionales y el Mades prometieron que en la próxima semana estarían interviniendo ambas arroceras para incautar todos los equipos de bombeo de agua.

Productores tienen grandes pérdidas

El productor Rodolfo Méndez dijo que la situación ya les ha causado pérdidas millonarias que superan los US$ 500.000 y por esa razón dejaron de operar en el lugar. Lamentó la persecución entablada por los lugareños y la falta de apoyo de las autoridades de turno. Aseguró que en todo momento se pusieron a disposición de las autoridades, pero que el caso ya es insostenible y se mudarán a otro sitio donde puedan trabajar.

Por su parte, el arrocero argentino, Javier Chaliol, aseguró que las ultimas lluvias ayudaron a cargar su reservorio de agua y que actualmente no está bombeando agua del cauce hídrico. Dijo que, si consigue los permisos, seguirá operando en el lugar.

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