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Masi escribió en su cuenta de Twitter este domingo que se encontraba leyendo un borrador de libelo acusatorio contra la fiscala general del Estado, Sandra Quiñónez. “Un equipo está trabajando y ultimando detalles y otros hablando con parlamentarios interesados. Creo que somos muchos y necesitamos el apoyo real de todos/as”, añadió la legisladora en un tuit.
En contacto con ABC Color, la senadora del PDP confirmó las negociaciones con algunos diputados para impulsar este pedido, que cobró fuerza tras la denuncia que realizó el ministro del Interior, Arnaldo Giuzzio, en contra del expresidente Horacio Cartes ante la Seprelad.
El jueves pasado, el titular de Interior vinculó a Cartes con un esquema de contrabando y lavado internacional de dinero durante una comparecencia ante la Comisión Permanente del Congreso. Las graves acusaciones no fueron tenidas en cuenta hasta ahora por la Fiscalía para arrancar una investigación.
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Cabe recordar que la Fiscalía conducida por Quiñónez -quien fue ubicada como fiscala general del Estado en marzo de 2018 por el expresidente Cartes- siempre tiende a “blanquear” o “cajonear” las causas de políticos vinculados a Honor Colorado.
Ayer, el senador Jorge Querey, del Frente Guasu, recordó que el Ministerio Público nada hizo hasta ahora en relación a un informe especial preparado en una comisión bicameral sobre el “doleiro” Darío Messer, exsocio de Cartes. El reporte está en el “freezer” en la Fiscalía.
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La semana pasada, el también senador Hugo Richer (Frente Guasu) dijo que este es el momento adecuado para impulsar un juicio político contra Quiñónez y aseguró que hay muchos casos de corrupción que no fueron investigados y la ciudadanía necesita “mensajes” debido a la crisis y a la decepción generalizada.
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La posible presentación de este pedido de juicio político también se da en el marco de una ruptura completa de relaciones entre el abdismo y el cartismo tras una “Operación cicatriz” que feneció de cara a las internas de diciembre de este año, que definirán a los candidatos de la ANR a la presidencia y otros cargos electivos, además de un nuevo presidente del Partido Colorado.
La alianza del abdismo con el sector liberal y otros de la oposición permitió salvar el viernes pasado al ministro del interior, Arnaldo Giuzzio, también de un eventual juicio político.
Esta coyuntura se presenta desfavorable para Quiñónez, quien ya se salvó de un pedido de juicio político por mal desempeño de funciones en mayo de 2020. En ese entonces, la “Operación cicatriz” entre abdistas y cartistas la salvó del proceso.