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La Comisión de Hacienda, presidida por Juan Darío Monges (ANR, oficialista), analizó hoy el proyecto que crea el Seguro de Desempleo y la minoría de los miembros emitieron un dictamen a favor de su aprobación. De ocho integrantes presentes, solo dieron su respaldo el propio Monges, Amado Florentín (PLRA, B) y Esperanza Martínez (FG).
A pedido de Desirée Masi (PDP) la comisión también emitió un dictamen en contra de la aprobación.
Al inicio del debate el titular de la comisión dijo que las autoridades de la Unión Industrial Paraguaya (UIP) pidieron la postergación del proyecto.
El proyectista, Juan “Ancho” Ramírez (PLRA, llanista) sostuvo que su propuesta es muy importante ya que el último subsidio a los desempleados durante la pandemia costó al gobierno US$ 100 millones.
Dijo que los pronósticos señalan que el fondo podría llegar a los US$ 70 millones una vez se promulgue. Acusó a la UIP de haber participado en varias audiencias pero que nunca enviaron sus recomendaciones por escrito. Agregó que el titular del IPS, Vicente Bataglia, tampoco nunca acudió a las convocatorias pero que tras enviar a varios “secretarios”, se consensuó un proyecto final.
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Sostuvo que en varios países del continente y de Europa existe este seguro y en todos los casos es financiado por aportes del empleador y el trabajador.
G. 24.000 menos en el salario
Reiteró que para el empleado este aumento solo significa un descuento de G. 24.000 o “cuatro pilsen’i”. Dijo esto en alusión a la fuente de financiación. La propuesta legislativa incluye como fuente de financiamiento del fondo de desempleo a ser creado y administrado por el IPS el aumento del 1% al aporte obrero (del 9 al 10%) y del 1% (del 16 al 17%) del aporte de los patrones.
Amado Florentín (PLRA) dijo que el proyecto es necesario pero que la resistencia está entre el empresariado por el aumento del aporte patronal al IPS para financiar este fondo.
Esperanza Martínez (FG) dijo temer que los empresarios aprendan a aprovecharse de la ley para no pagar salarios dignos a sus empleados. Subrayó que tiene sentimientos encontrados ya que está favor del seguro pero advierte que puede traer mayor precarización laboral. Señaló que en Paraguay los empresarios no pagan siquiera el salario mínimo. Agregó que incluso dentro del Senado una empresa de limpieza paga sueldos miserables a las limpiadoras que ruegan un mejor trato.