Caacupé: Vendedores buscan superar la crisis y hacerse de aguinaldo

La pandemia no termina y la crisis tampoco, aseveran vendedores fijos y temporales de Caacupé, que con la reapertura de la festividad mariana esperan juntar un poco de dinero, hacerse de aguinaldo para la compra del pan dulce y el festejo del Año Nuevo.

Vendedores esperan tener un buen margen de ganancia en esta festividad para pasar las fiestas de fin de año.
Vendedores esperan tener un buen margen de ganancia en esta festividad para pasar las fiestas de fin de año.Diego Peralbo, ABC Color

Cargando...

Doña Luisa Fariña (80) es una de las vendedoras más antiguas de Tupãsy Ykua, conocida en el rubro del asadito y la butifarra.

Según comentó, el año pasado la pandemia generó un escenario muy atípico en lo comercial, que estuvo acompañado de un gran silencio en las calles de la capital espiritual. Expresó que económicamente la crisis sanitaria golpeó y bastante el bolsillo de los vendedores fijos y temporales, quienes durante los días de la mayor fiesta mariana buscan juntar un poco de platita para comprar el pan dulce y pasar las fiestas de fin de año.

Resaltó el hecho de que se hayan retomado las actividades, pero afirmó que el movimiento comercial es poco en comparación a la misma época pero en la prepandemia. Doña Luisa, que ahora se enfoca también en la venta de bidones, no pierde la esperanza de que todo mejore y por eso ora a la Virgencita.

Dos tatakua morotî alistaron ayer de tarde más de 5.000 chipas
para ofrecer a los fieles, en la compañía Potrero Po’i
Dos tatakua morotî alistaron ayer de tarde más de 5.000 chipas para ofrecer a los fieles, en la compañía Potrero Po’i

Lotes alquilados

La Municipalidad de Caacupé habilitó un total de 1.166 espacios (lotes) para vendedores en este 2021, de los cuales alcanzó a alquilar 828. El total disponible representa 262 lugares menos que diciembre del 2019. Este año, asimismo, los vendedores oriundos de Caacupé tuvieron una exoneración del 50% del pago del puesto.

Los vendedores trabajan y se ingenian para hacer frente a esta situación. De acuerdo a lo manifestado por algunos comerciantes, los visitantes optan mayormente por los recuerdos con precios más económicos, como los llaveros y pulseras, que se venden desde G. 5.000, imágenes de la Virgen desde G. 10.000, remeritas, guampas, rosarios, entre otros.

Otro de los artículos preferidos por los fieles es la jarra forrada y con imagen de la Virgen, según indicó Mariela Benítez, quien hasta ayer ya vendió varias docenas de este recuerdo.

Los vendedores de bidones y de chipa son otros de los que esperan repuntar las ventas, pues alegan que la compra por parte de los visitantes hasta ayer fue muy baja. No obstante, Norma Medina, de la compañía Potrero Po’i, se alistó ayer con más de 5.000 chipas. “El año anterior no hubo nada y ojalá que mañana (por hoy) mejore. Esto es para nosotros como un aguinaldo cerca de fin de año”, subrayó.

Enlance copiado
Content ...
Cargando...Cargando ...