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La reprogramación ya había sido aprobada por la Cámara de Diputados en la sesión extraordinaria del miércoles 10 de este mes, a pedido del ministro de Salud, Julio Borba.
Son G. 150.000 millones (US$ 21,4 millones) para implementar de manera gradual la reducción de la carga horaria de 24 horas a 12 horas por vínculo, la contratación de personal para cubrir esa brecha del servicio y para el aumento salarial desde el segundo semestre para los médicos mediante un sistema de escalafonamiento.
Los fondos reprogramados se asignan de la siguiente manera: G. 22.425 millones para el pago de la remuneración complementaria para los que seguirán cumpliendo la carga horaria de 24 horas semanales; G. 70.590 millones para la contratación de personal de salud para cubrir las vacancias que se producirán por la reducción de la carga horaria; y G. 75.485 millones para implementación del escalafón conforme a la antigüedad (aumento salarial).
Varios senadores votaron en contra de esta medida, argumentando que se estarán financiando gastos corrientes con deuda y porque se está recortando de las previsiones para la compra de medicamentos y vacunas, que se debería ser la prioridad ante la tercera ola de covid-19 que se viene.
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Entre los que se opusieron están los senadores Stephan Rasmussen (PPQ), Desirée Masi (PDP) y Esperanza Martínez (FG), pero la mayoría votó por aprobar la reprogramación.
La sesión del Senado continúa con el debate sobre el presupuesto de las diferentes instituciones, entre mociones de más recursos que en la mayoría de los casos están siendo rechazados, por el momento.