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Hoy prosigue el juicio oral y público contra el ex dirigente deportivo Ramón González Daher y su hijo Fernando González Karjallo, en la causa por usura y lavado de dinero. Uno de los querellantes,
El arquitecto Julio Mendoza Yampey declaró hoy como testigo en el juicio oral contra el ex dirigente deportivo Ramón González Daher y su hijo Fernando González Karjallo, acusados de supuesta usura y lavado de dinero. El querellante refirió que RGD le cobró el 267% en relación a los préstamos que le otorgó, entre los años 2016 y 2018.
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“Podemos decir que la suma de los cheques que deposité en mi cuenta alcanza G. 15.980 millones; eso es la suma porque no es el monto de la deuda que yo iba amortizando. Yo le di cheques a él por G. 42.700 millones, 267% con respecto a la suma de sus cheques, de los cuales efectivizó G. 23.700 millones y por G. 19.000 millones me demandó”, detalló Mendoza Yampey.
El testigo precisó que RGD presentó una demanda en su contra por G. 14.000 millones en el fuero penal. Comentó que la causa fue desestimada por el Juzgado a cargo y que dicha decisión fue apelada por el ex dirigente deportivo.
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Asimismo, indicó que el ex dirigente de la Asociación Paraguaya de Fútbol presentó otra demanda en el fuero Civil, por alrededor de G. 5.000 millones. La sentencia fue favorable al hoy acusado de usura y lavado de activos, pero la defensa de Mendoza Yampey apeló el fallo de primera instancia y el caso está ahora a cargo de la Cámara de Apelaciones.
Empresa paralizada y sin empleados
El presidente de la firma “M y T Construcciones” también declaró que sufrió perjuicios económicos que derivaron en la paralización de su empresa y el despido masivo de sus empleados.
“Ahora me siento mejor, pero estuve muy mal”, afirmó.
En su declaración ante el tribunal de sentencia Especializado en Delitos Económicos, integrado por las juezas Claudia Criscioni (presidenta), Yolanda Morel y Yolanda Portillo, el querellante adhesivo recordó que como proveedora del Estado su empresa fue adjudicada con importantes obras como la Torre Norte del Palacio de Justicia, la actual sede del Congreso Nacional, el Barrio San Francisco y la Autopista Ñu Guasu.
Detalló que en el 2016, debido al retraso del Estado con los pagos, las entidades bancarias le cerraron las puertas a su empresa constructora, por lo que se vio obligado a recurrir a los préstamos usurarios de Ramón González Daher, para poder cumplir con los compromisos contraídos.
Declaraciones sustentan acusación, según fiscal
En la audiencia de hoy también declaró como testigo el empresario Juan Eugenio Planás Gómez -también querellante adhesivo en esta causa- quién reveló el esquema utilizado por el acusado para otorgar los préstamos con intereses usurarios y luego denunciar por estafa a sus clientes, en complicidad con la fiscalía.
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Planás relató que Ramón González Daher le otorgó dos créditos con una tasa de interés anual del 72%, cifra que excede ampliamente el tope fijado por el Banco Central del Paraguay, que es del 38% anual en promedio.
El fiscal Osmar Legal, de la Unidad contra Delitos Económicos y Anticorrupción, dijo que las declaraciones testificales dieron certeza a la acusación fiscal y explicaron cuál era el papel de Fernando González Karjallo en la estructura familiar para la usura.
“Los testigos comentaron que Fernando hacía oficina con su papá, él era partícipe de las transacciones y las conclusiones en cuanto a los montos de la usura y se encargaba de librar los depósitos hechos en las entidades bancarias”, puntualizó el agente del Ministerio Público.
El juicio oral y público continúa el jueves, desde las 8:00, con la producción de las pruebas documentales ofrecidas por las fiscalía, la querella adhesiva y la defensa.