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Al vertedero municipal, ubicado en el barrio Virgen de Fátima, llegaron los jornaleros porque desde el viernes iniciaron una serie de manifestaciones en protesta a la falta de pago de más de dos meses que se les adeuda en concepto de sus salarios. Sin embargo, hasta la fecha no consiguieron que el actual intendente, Carlos Amarilla (ANR), les pague sus haberes atrasados.
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La medida de fuerza fue iniciada tras enterarse que cinco funcionarios administrativos, que ingresaron con el intendente Amarilla el pasado 9 de julio están al día en el cobro de sus salarios. Sin embargo, los jornaleros y contratados llevan más de dos meses sin cobrar, lo que genera malestar en los trabajadores humildes que tienen hijos que alimentar, padres enfermos a quien comprar sus medicinas y tienen cuentas que pagar en despensas y bancos, manifestó indignado el encargado de los jornaleros Reinaldo Martínez.
A su vez, el funcionario Mariano Portillo, dijo que ellos habían presentado una propuesta al intendente Amarilla, para que usen los fondos de más de G. 90 millones que dispone en el banco, producto de la venta de un tractor y que cuando vaya ingresando se reponga. Pero dicha propuesta no aceptó y ahora se supo que va sustituir a los jornaleros, por lo que salen a defender sus trabajos y a exigir el pago atrasado de sus haberes.
Los manifestantes fueron tajantes al manifestar que no levantarán la medida de fuerza hasta que se les pague porque todos los días ingresa dinero en la Municipalidad.
El intendente ayer informó que necesita más de G. 43 millones para pagar salario de funcionario administrativo como de jornaleros.
Los trabajadores municipales aseguran que ellos solo están motivados por la necesidad que tienen de querer cobrar y que detrás no hay ningún interés político. Las elecciones ya terminaron, aunque manifestaron que el intendente reelecto Luciano Cañete (ANR), le igualaba a todos cuando pagaba salarios. “Amarilla prioriza el pago a sus ‘paquitos’” denunciaron.
La Municipalidad local asegura se encuentra sin recursos para hacer frente al costo operativo de la institución. La Junta Municipal en el marco de “Urgencia Financiera” había recomendado al intendente Amarilla gestionar un préstamo de G.600 millones y poner como garantía un terreno municipal, pero según el ejecutivo comunal no consiguió con los bancos.