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A finales del mes de febrero se produjeron las últimas lluvias que superaron los 100 mm, inclusive en algunas zonas del departamento, las precipitaciones fueron superior a los 150mm, el gran volumen de agua caída en esos días, hizo posible que se puedan llenar los tajamares y aljibes, pero ahora ya están secos.
Desde aquella fecha ya pasó 7 meses que no se registran lluvias importantes, solo esporádicos aguaceros. Esta situación sumada a las altas temperaturas que se registran y que fácilmente superan los 43º hace que rápidamente se evapore el agua afectando directamente a los pobladores que se abastecían de los tajamares.
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Los grandes ganaderos casi no tienen problemas con la escases de agua, al menos por ahora, atendiendo que por la infraestructura que tienen, poseen grandes tajamares y aljibes. Sin embargo, la falta de lluvia les afecta a la hora de conseguir alimento para los animales, atendiendo que los campos pastoriles están secos.
La semana pasada y tras el pedido de auxilio de pobladores a las autoridades, llegaron hasta Fuerte Olimpo 2 camiones cisternas, uno perteneciente a la Essap y otro a la SEN. Con estos vehículos llevaban agua de manera permanente a las comunidades de Toro Pampa, San Carlos y María Auxiliadora.
El vital liquido también fue llevado para asistir a los alumnos y maestros de la escuela internada Ñu Apua, distante a 90 kilómetros de esta capital departamental.
El camión de la Essap el lunes partió hacia su base en la localidad de Loma Plata, y tras la presión de autoridades locales, el ministro de la SEN Joaquín Roa, autorizó que el vehículo perteneciente a la institución, permanezca en el distrito hasta tanto lleguen las lluvias a la comunidad. Esto ayudará a que las personas de las comunidades citadas, puedan recibir agua de manera permanente.
Bajante del río
El 24 de octubre del 2020, la altura del río Paraguay frente al puerto de Fuerte Olimpo, era de 1,27 cm, en la fecha el registro es de 1,54 cm, atendiendo que este mes recién comienza y de no producirse lluvias, se cree que esa marca del año pasado será superada.
Para que el río pueda recuperar su caudal, deben darse lluvias que superen los 300 a 400 mm, en esta cuenca norte del Pantanal, considerada naciente del río Paraguay.
A consecuencia de esta situación, nuevamente las embarcaciones de gran calado, como los remolcadores que transportan minerales y granos hasta el Río de la Plata, ya casi no circulan por la zona, atendiendo la gran cantidad de pasos difíciles que deben intentar superar.
