No dan clases presenciales por peligro de derrumbe y obras a medio terminar en Villarrica

VILLARRICA. En la escuela y colegio Manuel Ortiz Guerrero, institución emblemática de Villarrica, las clases presenciales no pudieron arrancar debido a que existe peligro de derrumbe y hay obras a medio terminar a cargo de la Gobernación de Guairá. En consecuencia, los estudiantes continúan con las clases virtuales.

El techo de una de las aulas se encuentra en deplorables condiciones en la Escuela Manuel Ortiz Guerrero de Villarrica.
El techo de una de las aulas se encuentra en deplorables condiciones en la Escuela Manuel Ortiz Guerrero de Villarrica.Carlos Ávalos

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La construcción de un tinglado, con vestidor y nuevos baños sexados, están a medio culminar, como también falta refaccionar los sanitarios más viejos, contó la directora de la Escuela Básica N° 340 Manuel Ortiz Guerrero del barrio San Miguel de Villarrica, Norma Graciela Vera de Pereira.

Las obras arrancaron ya en diciembre del año pasado, pero los trabajos pararon varios meses y recientemente se reactivaron, contó.

A esto se suma que las termitas está afectando un bloque con tres salas clases. “Tenemos algunos peligros de derrumbe por termitas y hundimientos de piso (...) Ya hemos solicitado ayuda a las entidades gubernamentales, a la Municipalidad y a las autoridades educativas departamentales para que intervengan”, indicó la directora.

En gran parte el techo y las paredes sufren de grietas y fisuras que representan un peligro para los estudiantes.
En gran parte el techo y las paredes sufren de grietas y fisuras que representan un peligro para los estudiantes.

Explicó que en general las aulas están en condiciones para recibir a los alumnos en grupos burbuja, pero se seguirá con la modalidad virtual hasta tanto las obras se terminen y los sanitarios se adecuen. Es que no hay autorización del Equipo de Gestión de Riesgos de la Dirección Departamental de Educación, reconoció.

Además de las aulas con techos invadidos por termitas, las paredes también muestran grandes grietas y fisuras por todos lados, lo que representa un peligro para los niños. La institución también urge la dotación de mobiliarios nuevos como pizarras, ventiladores, sillas con pupitres, entre otros, debido a que los existentes son muy antiguos y están bastante deteriorados.

La escuela, en los turnos mañana y tarde, cuenta con 303 alumnos. Solo 13 de las 16 aulas pueden ser utilizadas y en las mismas instalaciones funciona también el colegio en el turno noche.

Construcción de un tinglado con vestidor y baño sexado, obra retrasada de la Goberanción de Guairá.
Construcción de un tinglado con vestidor y baño sexado, obra retrasada de la Goberanción de Guairá.
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