Cargando...
De acuerdo a las informaciones recabadas por los agentes de Investigación de Hechos Punibles de la Policía del Departamento Central, Édgar Eduardo Cardozo Salgueiro, alias “Pira’i”, un microtraficante que estaba al servicio del poderoso “Clan Rotela”, ya sabía de antemano que el grupo criminal planeaba eliminarlo debido a que no había pagado por las drogas que había adquirido para su distribución.
Presuntamente le amenazaron que si él no se entregaba iban a matar a dos de sus familiares.
Fue entonces que Cardozo tomó la decisión de entregarse personalmente a los sicarios, quienes la noche del miércoles último lo alzaron a la fuerza en una camioneta al salir de su vivienda en el Bañado Sur de la capital y lo trasladaron.
Conforme a lo trascendido, el microtraficante envió a sus familiares un vídeo de tres segundos de duración donde les advertía de su secuestro con fines de ejecución.
También les envió mensajes de despedida a sus hijos y cuando llegaron al lugar donde debía ser eliminado, en las inmediaciones del Ytororó Country Club de la ciudad de Ypané, tomó una fotografía de la camioneta que usaron los sicarios para transportarlo hasta el sitio de su ejecución.
Los investigadores refieren que una vez que asesinaron a Cardozo con disparos de arma de fuego, los sicarios enviaron por WhatsApp el sitio donde abandonaron su cadáver para después perder contacto con los familiares.
“Mercancía” no pagada
Según los datos investigativos, la ejecución de Édgar Eduardo Cardozo Salgueiro apunta a una supuesta paga no concretada por el microtraficante al “Clan Rotela” por los estupefacientes que había adquirido del grupo criminal para su posterior venta entre consumidores.
Además, Cardozo Salgueiro estuvo preso por tráfico de drogas en la Penitenciaría Nacional de Tacumbú hasta que recuperó su libertad el 22 de abril pasado, según las fuentes ligadas a la investigación.