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La avenida Artigas, que constituye una de las entradas principales al centro de Asunción, permaneció congestionada casi toda la mañana de ayer. En principio era por la extensa fila de vehículos que aguardaba ingresar al vacunatorio de un sanatorio privado, pero el caos empeoró al registrarse un bloqueo intermitente del camino por parte de un grupo de indígenas, a la altura de la calle Tte. Cusmanich, frente a la sede del Instituto Paraguayo del Indígena (Indi).
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El cierre sobre Artigas se volvió prácticamente cotidiano desde que el Indi funciona en las instalaciones de la Intendencia del Ejercito. Esta situación perjudica a su paso a cientos de trabajadores que transitan en buses o en sus propios automóviles diariamente. Ayer los afectados lamentaron la nula presencia de agentes de tránsito para agilizar el paso y realizar desvíos.
En medio del caótico tránsito, nuestro diario constató que algunos manifestantes cobraban un “peaje” para permitir el paso de conductores.
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Entretanto, integrantes de la comunidad de Tuna Poty, de Curuguaty, liderado por Arnaldo Vera Benítez, como también de la comunidad Isla Ñu de Repatriación, encabezada por Antoliano Candia, y otros nativos provenientes de 14 departamentos, se concentraron asimismo frente a la Comandancia de la Policía Nacional.
También se movilizaron esta semana en Asunción miembros de la Organización Nacional de Aborígenes Independientes (ONAI), que el jueves llegó a un acuerdo con el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) y que ayer fueron hasta el Indi para gestionar el retorno a sus comunidades.
Los reclamos al Indi por parte de estas comunidades abarcan desde pedidos de kits de alimentos y otros víveres, como frazadas, colchones y chapas , hasta trámites para la titulación de inmuebles, reconocimiento de líderes, obras públicas, entre otros.
Algunos de estos núcleos lograron ingresar al Indi para negociar, mientras que otros seguirán aguardando respuestas y realizando cortes de calles en la semana, anunciaron. Hasta anoche el presidente del Indi, Édgar Olmedo, no respondió a nuestras consultas sobre los problemas que enfrentan las comunidades indígenas de nuestro país que, sin soluciones sostenibles, vuelven a Asunción periódicamente para hacer sentir sus reclamos.