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El parque nacional se encuentra a unos 25 kilómetros del casco urbano y está bajo la administración del Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (Mades). Durante la pandemia que se inició en marzo del 2020, dicho espacio natural estuvo cerrado para evitar la aglomeración de personas. Desde el pasado 20 de julio nuevamente se habilitó para la entrada de público con ciertas restricciones, pero cumpliendo el protocolo sanitario, informó la jefa de guardaparques, Rosa Benítez.
El Parque Nacional de Ybycuí, ubicado a 151 kilómetros de Asunción, fue creado por Decreto N° 32.772 del 16 de mayo de 1973. Los que quieran pasar en familia y disfrutar de una aventura ecológica en el lugar lo pueden hacer llegando hasta el sitio y pueden comenzar conociendo los arroyos que se encuentran dentro del parque y a comenzar a recorrer los saltos de agua, como el Salto Minas, Salto Guaraní, Salto Escondido y otros que están dentro del área protegida del parque nacional.
Asimismo, se dispone de senderos que llegan hasta los saltos, entre los que se encuentran el sendero Guaraní, zona histórica, sendero Mirador, que tienen una extensión para caminar entre 550 metros y el más cerca de hasta 3.500 metros, de accesos alternativos que conducen hasta los arroyos o a las caídas de agua de los saltos, que los visitantes pueden recorrer y de paso apreciar la naturaleza del lugar, explicó la jefa de guardaparques, Rosa Benítez.
Lo que siempre se recuerda a los turistas es que está prohibido cortar o extraer del lugar las plantas silvestres y las basuras deben llevarse consigo para así evitar la contaminación del lugar, del agua y de esa manera se cuida el hábitat de la fauna, remarcó Benítez.
Museo histórico La Rosada
En la entrada al parque se encuentra una caseta donde los turistas reciben todas las instrucciones antes de entrar al Parque Nacional y luego ya ingresan para disfrutar del lugar. Uno de los atractivos más visitados es el Museo Histórico La Rosada, en cuyo interior se puede apreciar una historia de lo que se llegó a producir en el lugar.
El museo La Rosada funciona desde 1975 y en el lugar se puede encontrar una maqueta que muestra lo que fue la estructura de la fundición de hierro antes de ser destruida, además de la réplica de madera del Cañón Cristiano. Dicho cañón fue fabricado en 1868 con hierro y bronce de las campanas de las iglesias del Paraguay.
En las vitrinas se pueden observar también algunos objetos como: fusiles, municiones, utensilios, marcas para animales, cañones, balas de cañón, frenos de caballos, frenos de la rueda hidráulica y moldes para fabricar cañones. Además, se tiene una reseña histórica de lo que fue el lugar, que se dividía en 28 sectores.
El lugar era como una urbanización cerrada, contaba con hospital, cementerio, despensa, comandancia, capitanía, maestranza, galón de materiales, habitación de artesanos, almacén, represa de agua, canal de agua de la máquina, galpón de depósito de minas y de carbón, rampa para alzar al alto horno carbón y minerales. Además, se disponía de una casa de máquina de alto horno, plaza, puentes, asta de bandera, guardia, carcelería, corralón, cocina, despensa y sanitarios.
Fundición de hierro, “un símbolo del dolor”
En la placa de historia que se encuentra en el museo se señala que la fundición de hierro de La Rosada, cuyo nombre oficial era “Establecimiento de la fábrica de fierro en el arroyo Ybycuí”, construida en 1854 por William Whitehead, conformaba junto con el ferrocarril, el telégrafo, los astilleros, el arsenal y otros emprendimientos el ambicioso proyecto modernizador que el Gobierno paraguayo necesitaba para abrirse al comercio internacional en un contexto político difícil, donde el bloqueo de la navegación hacia la cuenca del Plata y el no reconocimiento de la independencia del Paraguay pusieron a prueba la capacidad de negociación de los paraguayos, que obtuvieron en 1853 la concreción de los primeros tratados de navegación y comercio.
Durante la Guerra de la Triple Alianza (1865-1870) en el lugar funcionaba un pabellón de la comandancia y otro pabellón de los presidiarios. Cuando en el sector de la fundición de hierro se estaba preparando fusiles, cañón, proyectiles y otros elementos para los soldados paraguayos, el lugar fue bombardeado el 17 de mayo de 1869 por las fuerzas aliadas uruguayanas (Argentina, Brasil y Uruguay).
En dicha fundición de hierro, el entonces presidente de la República, Carlos Antonio López, ordenó que los reos cumplan parte de su condena en la fábrica de hierro de Ybycuí, instalación industrial que requería de mano de obra para la producción que llevaba en ese entonces. A partir de 1850, en la fundición trabajaban 231 reos, que se dedicaron también a varias tareas, incluso el trabajo agrícola.
En un informe de Augusto Liliedat, entonces director de la fundición de hierro, comunicó al Presidente que “con los peones presos se concluyeron las dos casas”, señala un artículo de la Revista de Historia de las Prisiones N° 5, Pedro R. Caballero. Luego del ataque se quedó en ruinas y su reconstrucción se inició en el año 1973 y se inauguró el 8 de setiembre de 1975.
Horario de ingreso al parque
El horario de ingreso es de 08:00 a 15:00 y la permanencia en el lugar va hasta las 17:00. La zona de los saltos del Mbocaruzú del Parque Nacional Ybycuí sigue prohibida para el baño y permanencia de los visitantes. No podrán ingresar al área silvestre protegida personas mayores de 65 años y los menores de 18 años deberán estar acompañados de un adulto responsable, por lo que al momento del registro deberá solicitar que se incluya como dato la edad.
Se tiene un precio fijo para el ingreso al parque nacional: los menores de 11 a 17 años pagan G. 5.000 y los de 18 y más, G. 20.000. El ingreso en colectivo es G. 60.000, en furgón G. 35.000, en auto G. 15.000 y en moto G. 5.000.
En el parque no se admite por ahora la instalación de camping. En el lugar trabajan como custodios del parque nacional un total de 12 guardaparques. Para más informes llamar al (0981) 606-993.