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Este domingo es el aniversario número 17 del incendio del supermercado Ycuá Bolaños de Asunción, un siniestro que causó la muerte de más de 400 personas y dejó a un gran número de heridos el 1 de agosto de 2004.
Familiares de víctimas, sobrevivientes del incendio y autoridades del Gobierno se reunieron este domingo en el Sitio de Memoria y Centro Cultural 1A-Ycuá Bolaños, en el lugar donde estaba el edificio siniestrado, para homenajear a los desaparecidos.
Jorge Alfonso, en representación de los familiares de víctimas, dijo durante el acto que “quienes fuimos afectados (por la tragedia) llevaremos esa marca de por vida”, indicando que “las derivaciones de la tragedia son una pesada carga que tuvimos que llevar por años”.
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Como una de esas derivaciones citó “los viles y maquiavélicos trabajos jurídicos que llevaron a cabo inescrupulosos abogados para que cientos de víctimas pierdan sus casos civiles” contra los responsables del supermercado siniestrado.
Y agradeció el apoyo a los familiares de parte de los contribuyentes de la ciudad de Asunción, los bomberos voluntarios que asistieron a las víctimas en el día del incendio y los apoyaron durante los años siguientes, y a la prensa.
Cristian Olmedo, otro representante de los familiares, señaló que “Ycuá Bolaños” no solo es sinónimo de tragedia, sino también representa “la lucha persistente por la memoria, la justicia y la vida”.
CENTRO CULTURAL YCUÁ BOLAÑOS
Alfonso agradeció también a la Secretaría Nacional de Cultura por la “demolición de este monstruoso edificio que fue la tumba de nuestros familiares y el infierno de los sobrevivientes” y el proyecto de crear en el sitio “un hermoso y majestuoso edificio donde se va a practicar el arte y la cultura”.
En 2017, los restos del supermercado Ycuá Bolaños terminaron de ser demolidos para la construcción del Sitio de Memoria y Centro Cultural 1A-Ycuá Bolaños, que aún está inconcluso.
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En ese sentido, el ministro de Cultura, Rubén Capdevila, celebró que la semana pasada se concretó la transferencia definitiva de la propiedad del inmueble a la Secretaría Nacional de Cultura, lo que -en su opinión- “nos da la certeza de que podemos exigir un presupuesto digno para mantener y poblar este sitio con actividades culturales, conmemorativas” y convertir el Centro Cultural en un “espacio ecuménico digno para las familias”.
El ministro Capdevila indicó que el objetivo es que el lugar se convierta en “la infraestructura cultural más grande del país”.