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Pese al frío y la lluvia, en el vacunatorio que se montó esta mañana en el Sport Azucarero del Barrio Estación de esta ciudad, se registra una importante concurrencia con poco más de 400 metros de fila de vehículos, esto comparando a días anteriores que a apenas llegaban a los 200 metros. Además de autos particulares, la gente llegó en taxi, minibús, motocarro y el tradicional Karumbé (Taxi a caballo) e incluso galopando a caballo como se observó ayer.
El director del Hospital Regional, Dr. Cristhian Matto, destacó la masiva concurrencia de personas a pesar de la lluvia. “Esto dice mucho de la ciudadanía guaireña, la gente quiere vacunarse, tenemos equipo y muchas vacunas. La gente llega en diferente tipo de vehículos, ya vinieron en karumbé, taxi, moto, y si vienen en bicicleta igual les vamos a vacunar, el objetivo es inmunizar a la mayor población posible”, indicó el médico.
En el departamento de Guairá se sigue teniendo en cuenta las terminaciones de cédulas para la vacunación. Las autoridades de la IV Región Sanitaria ya solicitaron la liberación, pero hasta el momento no hay respuesta favorable del Ministerio de Salud.
“KarumbéVac”
Ayer, Villarrica se destacó en varios medios de comunicación y redes sociales debido a la peculiar manera en cómo los guaireños llegan al autovac para recibir sus dosis contra el covid-19. Llegan en motocarros, motos, carritos, hasta en caballo, sin embargo, el más apreciado es el tradicional Karumbé (taxi a caballo) que es utilizado como medio de transporte desde hace más de 55 años en Villarrica.
Uno de los “karumbeseros”, Miguel González, además de llegar con su karumbé para vacunarse contra el coronavirus, también realiza trabajos de traslado de pasajeros hasta los dos vacunatorios habilitados en esta ciudad, modo autovac y peatonal.
“Vine a vacunarme y de paso también traje dos pasajeros también para vacunarse. Con la lluvia muchos no pueden ir al vacunatorio porque están en moto o a pie, entonces nos llaman y hacemos el servicio sin problemas”, indicó el trabajador.
Asimismo, comentó que durante la cuarentena estricta el rubro se vio muy afectado debido a la nula concurrencia de los turistas, que son sus principales clientes. “Pasamos muy mal durante las restricciones, no teníamos ni un solo cliente, la gente que llegaba de otras ciudades eran los que más pedían nuestros servicios, hacíamos recorridos por sitios históricos o los llevamos donde querían, pero ahora de a poco estamos volviendo a trabajar”, explicó González.
Exitoso “motovac” en Villarrica
Por último, comentó que la Asociación de Karumeseros de Villarrica actualmente tiene operativo 15 karumbé con una parada en la terminal de ómnibus. El costo general por persona es de G. 20.000, pero varía de acuerdo a la distancia o recorrido que el cliente prefiere.