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En esta región del Chaco se localizan las ultimas reservas naturales de nuestro país, de hecho los mayores parques que deberían ser protegidos por las autoridades se encuentran en la zona, como ser el Defensores del Chaco.
Con cada incendio, como el del año 2019, se pierden extensos bosques vírgenes, y con ello se produce la muerte de cientos de animales silvestres, varias de ellas en peligro de extinción.
En esta región también se desplaza el extenso pantanal que posee una rica biodiversidad de flora y fauna. Solo en nuestro país, el año mencionado, se quemaron más de 350.000 ha., lo que ocasionó un tremendo daño al frágil ecosistema natural de la zona.
Los incendios forestales también ocasionan millonarias pérdidas económicas a los ganaderos del departamento, que con 1.800.000 cabezas, se convierte en el principal sostén económico de la región.
El fuego no solo destruyen los campos, sino también aniquila al ganado, que al encontrarse rodeado, no tiene escape y muere calcinado.
Causas
Gran parte de estos incendios son provocados de manera intencional por algunos ganaderos tradicionales, que creen con el fuego limpian las malezas de sus campos, pero no dimensionan el daño que puede ocasionar, sobre todo cuando la fuerza del viento hace que se extiendan hacia otros lugares, destruyendo todo lo que encuentra a sus paso.
Los cazadores furtivos, en escala menor, también son responsables y provocadores de las llamaradas, ya que queman los pastizales para sacar a sus presas de sus escondites.
Organismo de control
El Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (Mades) y el Instituto Forestal Nacional (Infona) deberían impulsar campañas de concienciación permanentes para prevenir estos incendios, antes que se conviertan en verdaderos desastres naturales. El Ministerio Público, en tanto, a través de los fiscales ambientales deben investigar los orígenes para caer con todo el peso de la ley sobre los infractores, para que sirva de ejemplo.