Cargando...
Este trabajo será la conclusión de la infraestructura eléctrica necesaria para que el Paraguay pueda retirar inclusive el 100 % de la energía de Yacyretá, reiteraron técnicos compatriotas de la Entidad Binacional Yacyretá (EBY). Previamente se había procedido a la adecuación de la Línea Paraguaya 2 (LP2), que completaron en diciembre de 2019. Ambos trabajos se realizan luego de 26 años de funcionamiento de la central, recordaron.
“Con la adecuación de la LP2, el Paraguay, por primera vez, accedió a la posibilidad de retirar el 50% de la producción que por tratado le corresponde, en tanto que, con la adecuación de la LP1, tendrá la capacidad de retirar el 100% de toda la producción, en circunstancias especiales que puedan generarse en el sistema de conexión del lado argentino”, explicaron desde la EBY.
Estratégico para el Paraguay
La conclusión de la adecuación de la LP1 en Yacyretá apunta a la concreción de la anhelada Red Integrada Energética Regional del Mercosur en 500 kV. Además, significará seguridad, confiabilidad y flexibilidad al Sistema Interconectado Nacional Paraguayo (SINP) administrada por la ANDE, de suma importancia para el Paraguay.
Los trabajos se iniciarán este sábado, 26 de junio en el Campo 25 de la LP1, consistente en la adecuación de potencia de 750 a 1.732 MVA de la LP1.
La inversión que requiera este programa asciende a la suma de US$ 5.000.000, a cargo de la contratista internacional Toshiba, con una duración de 65 días corridos desde el inicio de los trabajos, conforme al cronograma establecido.
Los técnicos nipones fueron recibidos este viernes por el jefe del Departamento Técnico de la Central Hidroeléctrica Yacyretá, Ing. Leopoldo Melo, acompañado de los técnicos responsables de los sectores involucrados.
Breve reseña
Las salidas para el suministro de energía al Paraguay, a través de las líneas paraguayas LP1 y LP2, aprobadas por las autoridades de la EBY en épocas de obras, fueron diseñadas y aplicadas en la Central Hidroeléctrica Yacyretá por medio de autotransformadores en el nivel de 220 kV y 250 MVA. Debido a esta situación, hubo un gran cuello de botella con el que el país tropezaba para disponer de la energía que por el Tratado corresponde.
Con esa configuración, la potencia total fue de 500 MVA, hecho que imposibilitando la concreción de una red integrada entre países limítrofes que requieren un sistema en 500 kV y alta potencia en sus líneas de transmisión.
A raíz de esta situación, se priorizó la adecuación de barras de las dos líneas paraguayas en 500 kV y 1.732 MVA, explicaron, que perlmite conseguir una nueva salida de suministro de energía eléctrica en 3.464 MVA de potencia, disponible para el Paraguay, ejerciendo definitivamente el pleno derecho a la energía que le corresponde.
La adecuación- la última- de barras que se inicia en el Campo 25 de la LP1 permitirá elevar la potencia, que está limitada a 750 MVA al nivel de 1.732 MVA, quedando de manera similar a la LP2, y con las dos líneas se completará la infraestructura eléctrica correspondiente a la Central Hidroeléctrica Yacyretá, según detallaron.
A su vez, permitirá a la ANDE realizar la anhelada interconexión con las Centrales Itaipú y Acaray; con la que habrá de crearse la Red Integrada de Energía Eléctrica Regional sincronizada más importante de Sudamérica que conectará a los sistemas del Brasil, Argentina, Uruguay, Chile y en el futuro con Bolivia y Perú.