Cargando...
La Cámara de Senadores sancionó hoy el proyecto de ley que reglamenta la distribución y proclamación de la lista de suplentes de la Cámara Alta. Los legisladores tenían que reunir 23 votos para ratificarse en la versión Senado, pero al no conseguir el número de votos requeridos, porque hubo solo 13, quedó aprobada la versión modificada por Diputados.
Lea más: Senado aplaza tratamiento de ley de reparto de suplencia
El senador Ramón Retamozo (ANR-Añeteté) señaló que se estaría violando la Constitución Nacional al aumentar el número de suplentes en la lista de senadores, pero el senador Stephan Rasmussen (PQ) explicó al pleno que la normativa no aumenta el número de suplentes, que sigue siendo de 30, sino que distribuye las suplencias por partidos.
“Este es un proyecto nuevo, no aumenta la cantidad de legisladores, se mantiene en 30, y se hace una distribución proporcional de lo escaños”, explicó Rasmussen.
La iniciativa presentada en junio 2020 plantea que los senadores de todos los partidos, incluido los minoritarios, tengan suplentes para que en caso de que pierdan su banca, por uso indebido de influencias u otro caso, puedan ser reemplazados por un legislador de su mismo partido.
El primer artículo establece que el Tribunal Superior de Justicia Electoral proclamará a al menos un senador por partido, alianza, concertación o movimiento que haya obtenido al menos un escaño.
Lea más: Modifican proyecto de suplencias en Senado
Para ello se determina un porcentaje para establecer cuales son los escaños para suplente que tendrá cada partido.
De esta manera, un senador que llegue al cargo como único referente de su partido, y en caso de inhabilidad, expulsión, muerte o renuncia, tendrá la seguridad que lo reemplazará alguien de su propia agrupación política. En este periodo ocurrió un caso con el senador Paraguayo Cubas (Cruzada Nacional), quien fue expulsado por la mayoría de sus colegas pero al no tener suplente en la lista, entonces ocupó su espacio Miguel Fulgencio Rodríguez del Frente Guasu.
Ahora la iniciativa legislativa pasa al Poder Ejecutivo para su promulgación o veto.