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CORONEL OVIEDO (Víctor Daniel Barrera Burgos, de nuestra redacción regional). Empresarios industriales de la firma Neualco anunciaron el viernes pasado que están con un 90% de avance las tratativas con un banco local para adquirir la planta alcoholera de Carayaó, la cual el próximo año se estaría poniendo en funcionamiento.
Hasta hoy el ingenio ha estado a cargo del Banco Atlas, que actúa como institución fiduciaria. Es que la citada cooperativa en el pasado había prestado de otros bancos la suma de G. 30.000 millones –con Atlas como fideicomitente–, pero no pudo honrar sus compromisos. Aquel préstamo impago, que debía ejecutarse para la construcción del ingenio alcoholero, derivó después en la quiebra de la empresa.
El presidente de Neualco SA, Carlos Morínigo, dijo a esta corresponsalía que están en muy buena negociación y que en los próximos 30 días ya se estaría cerrando el acuerdo para iniciar la reactivación en la zafra 2022.
Indicó que las nuevas máquinas para la planta alcoholera de Carayaó ya están en Paraguay y que una vez cerrado el negocio, ya se estaría procediendo a la renovación de los equipos de del ingenio en cuestión.
Morínigo no quiso hablar de montos de inversión, pero reiteró que casi todo ya está concretado.
Por su parte, el presidente de la Comisión de Liquidación de la Cooperativa Coronel Oviedo, Enrique Yegros, dijo que todos los bienes de la entidad ya pasaron a posesión de los bancos y que, actualmente, la comisión liquidadora ya no tiene participación en la venta de la planta alcoholera.
Explicó que hasta el momento nadie se comunicó con él, pero esperan que la venta se concrete para poder saldar las deudas con la fiducia y los bancos que otorgaron créditos.
Aclaró, sin embargo, que la venta podría concretarse en US$ 3.000.000 y que con ese dinero no alcanzaría a los ahorristas.
No recuperarían sus ahorros
La venta de la alcoholera genera opiniones contrapuestas, en vista de que el sector productivo ve esperanzado la reactivación de la fábrica, pero unas 25.000 personas ya no podrían recuperar sus ahorros.
La excooperativa logró pagar hasta ahora unos G. 10.000 millones de su deuda con entidades financieras y actualmente aún debe unos G. 20.000 millones al Banco Continental, a “Oikocredit de Holanda” y a la Central de Cooperativas (Cecopan).
A eso se suma la deuda de unos G. 3.000 millones con exempleados y G. 2.000 millones a ahorristas, quienes llevaron el caso a instancias judiciales; otros G. 45.000 millones también a socios ahorristas que no judicializaron y unos G. 10.000 millones a otras cooperativas ahorristas y crediticias. Estas deudas suman G. 60.000 millones.
En total, estamos hablando de compromisos por unos G. 80.000 millones.