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“No hay ninguna posibilidad de apertura de paso terrestre ni aéreo por el momento y hasta cerca de fin de año”, enfatizó Arriola esta mañana sobre las fronteras con Argentina. Explicó que si bien existen buenas relaciones con el Gobierno argentino, esta medida se debe a las políticas sanitarias del país vecino, para frenar el avance del COVID-19.
Añadió que cuando intentó negociar la apertura con su par argentino, debido a la preocupación de muchos compatriotas que deben realizar tratamientos médicos en Argentina, le recordó que existen permisos excepcionales para viajes vía aérea.
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La gestión para dichos vuelos se debe realizar en el Consulado de Argentina en Paraguay pero es muy baja la cantidad permitida.
Movimiento incesante con Brasil y EE.UU.
Por otra parte, resaltó que el paso por las fronteras terrestres con Brasil es incesante y se registra el ingreso de entre 4.000 y 5.000 turistas de compras cada día.
Sin embargo, el grueso migratorio se registra hacia los Estados Unidos debido al denominado “turismo de vacunas”. Cada semana al menos 850 paraguayos van en vuelos directos a Miami o con escala en Panamá. La cantidad de viajeros a Norteamérica pueden llegar a 1.000 por semana.
Arriola destacó que desde el 1 de abril hasta el 17 de mayo, 6.300 paraguayos y residentes viajaron a EE.UU., a los cuales se suman más de 1.500 extranjeros que toman Paraguay como ruta. Por ese motivo, el tráfico en lo que va del mes es de alrededor de 7.800 personas.