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Abdo firmó los dos documentos el sábado pasado: en el decreto 5.160 se establecen las restricciones que empiezan a regir desde hoy, 27 de abril, hasta el 10 de mayo, en que básicamente se restringe el horario de circulación no esencial en las ciudades consideradas “zonas rojas” entre las 20:00 y las 5:00, se fija las entregas por delivery solo hasta las 22:00 –siempre que no sean compras de farmacia– y se establece eventos sociales con asistencia reducida.
En el decreto 5.161, que regirá desde el 11 hasta el 24 de mayo, se flexibiliza el horario de circulación no esencial, que se permite desde las 5:00 hasta las 23:59 en estas ciudades “rojas”.
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Además, se permiten las entregas a domicilio, vía delivery, las 24 horas, sin importar el rubro que se comercialice, según se desprende del documento. Las reuniones sociales familiares pasarán a permitirse hasta 12 personas en todo el país (en las zonas “rojas” no se permite hasta el 10 de mayo) y los eventos sociales, así como los de culto, se unificarán: podrán reunirse hasta 75 personas en espacios cerrados y hasta 150 en espacios abiertos (actualmente, en las zonas “rojas” se permite solo un tope de 25 y 75, respectivamente).
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Las medidas a futuro unifican también la posibilidad de hacer actividad física en grupos de hasta cuatro personas. Las clases para estudiantes de la educación básica y media también quedan sujetas a lo que decida el Ministerio de Educación.
Hoy, en una conversación con los medios, el ministro de Salud, Julio Borba, informó que la intención de las medidas restrictivas es evitar la expansión del coronavirus para tratar de relajar los servicios de salud, actualmente colapsados por los miles de casos de la enfermedad.
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Borba dijo que las medidas de restricción más severas solo pueden dictarse durante 15 días, porque después la ciudadanía se cansa y no las cumple más. Prometió controles más estrictos tras ser increpado por el hecho de que en Semana Santa solo cumplieron las medidas las empresas del sector formal. Tampoco hubo descenso de casos tras esas disposiciones.
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Hasta ayer, la cantidad de decesos por la enfermedad trepó a 6.002, con 221.631 casos confirmados de forma oficial desde el 7 de marzo de 2020. La situación en los hospitales es crítica, con 3.074 internados por la enfermedad, 549 de ellos en Unidades de Terapia Intensiva.