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A casi siete años de que la Fiscalía acusara a 21 personas por el millonario desvío, finalmente esta semana el juez penal de garantías Gustavo Amarilla pudo concluir la audiencia preliminar con relación a seis acusados que dilataron con chicanas el proceso durante todo ese tiempo.
Se trata de los exministros del MAG Enzo Cardozo -exsenador liberal y actual parlasuriano- y Rody Godoy, la exdirectora de Administración y Finanzas Mariestela Azuaga y los exfuncionarios de la citada cartera, María Lourdes Vielma, Alberto Riquelme Paredes y Marcela Fleitas.
Durante la audiencia, los abogados Víctor Dante Gulino, Ricardo Preda y Osvaldo Bittar, defensores de Cardozo, Godoy y Azuaga, en ese orden, plantearon incidentes de prescripción, nulidad de acusación y sobreseimiento definitivo.
Gulino planteó además una excepción de falta de acción, por considerar que además del desafuero del cargo de senador, antes del procesamiento de Cardozo se debió impulsar un juicio político por haber integrado el Consejo de la Magistratura y un nuevo desafuero, tras su incorporación al Parlasur. Tras rechazar los principales incidentes de la defensa, el juez Amarilla que Cardozo, Rody y Azuaga vayan a juicio oral y público.
Es por el desvío de G. 68.000 millones que debieron favorecer a productores frutihortícolas, en los años 2012 y 2013.
Suspensión condicional del procedimiento
Por otro lado, el juez Amarilla resolvió hacer lugar a la suspensión condicional del procedimiento planteada por el abogado Osvaldo Bittar a favor de Vielma, Riquelme y Fleitas, procesados en carácter de cómplices.
El fiscal de delitos económicos Rodrigo Estigarribia no se opuso al planteamiento de la defensa.
El magistrado estableció que Riquelme y Paredes deberán donar G. 3 millones mensuales durante dos años a la Fundación San Joaquín y Santa Ana.
A su vez, Vielma deberá hacer lo propio a la misma entidad de beneficencia, pero por un monto de G. 1.500.000 mensual durante el mismo periodo.