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Vivian Genes, imputada por la quema de la ANR, actualmente se encuentra con prisión preventiva dentro de la Cárcel de Mujeres (en el Departamento Judicial de la Policía Nacional) y la situación epidemiológica dentro de las cárceles impide su admisión dentro de todo el sistema penitenciario.
La ministra Cecilia Pérez confirmó que en principio iba a ser llevada al Centro de Rehabilitación Social “CERESO”, de Encarnación, pero este también fue cerrado por el brote de casos confirmados dentro del penal, que ya son al menos 20.
Así también, destacó que lo mismo sucede con el Centro Penitenciario para Mujeres “Juana María de Lara”, de Ciudad del Este. Dijo que ya se comunicó del cierre a todos los órganos involucrados, por lo cual la joven estudiante no puede ser trasladada.
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Explicó además que ante el aumento de casos solo quedan abiertas dos penitenciarías, que son las de Villarrica y Misiones. Sin embargo, en la primera mencionada ya no hay espacio y, en la segunda, no puede ser admitida por cuestiones de seguridad. Resaltó que allí siguen con alerta tras el último suceso de violencia registrado con el Clan Rotela.
Genes es la única que sigue tras las rejas, puesto que ayer la Cámara de Apelaciones resolvió suspender la prisión preventiva y otorgar arresto domiciliario a los otros dos procesados por la quema de Colorado Róga que estaban en la Penitenciaría de Tacumbú: Pedro Areco Ríos y Luis Trinidad Paniagua.
Los tres jóvenes están procesados por supuestos hechos punibles de perturbación de la paz pública, producción de riesgos comunes, daño a cosas de interés común y daño a obras construidas o medios técnicos de trabajo.
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Brotes en las penitenciarías
El Ministerio de Justicia informó que el Centro Penitenciario para Mujeres “Juana María de Lara” de Ciudad del Este y al Centro de Rehabilitación Social “CERESO” de Encarnación también se encuentran cerradas a partir de hoy por confirmarse casos activos de COVID-19 en personas privadas de libertad.
En ambos lugares ya fueron activados los protocolos para mitigar la expansión del virus y los pacientes con COVID-19 están siendo aislados y monitoreados por la Dirección de Salud Penitenciaria. En la misma situación también se encuentran las dos cárceles de mujeres, la del Buen Pastor, en Asunción, y la Serafina Dávalos, en Coronel Oviedo.
Daniel Cantero, Director de Salud Penitenciaria, manifestó que los centros penitenciarios donde el virus está activo son constantemente monitoreados para prevenir la expansión del coronavirus. “Hoy tenemos ocho penitenciarías donde hay COVID-19, en esos lugares reforzamos los controles y procedemos al hisopado de las personas privadas de libertad con síntomas para descartar o confirmar la enfermedad”, añadió.
Por otra parte, los 27 adolescentes en conflicto con la Ley, del Penal del Centro Educativo Sembrador de Villarrica, que se habían contagiado ya están recuperados de la enfermedad. Sin embargo, en el Centro Educativo Itauguá, la Dirección de Salud Integral y Asuntos Sociales del SENAAI, se registran seis casos positivos y activos.
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