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La vocera, Karen Allen, explicó que en principio varios de ellos manifestaron su preocupación por esta situación en las redes sociales y luego, de manera espontánea, resolvieron formar un grupo de WhatsApp y convocar a la movilización.
La preocupación es la formación académica y también la salud mental de los niños y jóvenes, que comenzaron a mejorar su ánimo a partir de las pocas horas que pueden pasar en la escuela o el colegio con la implementación de las clases híbridas, en parte virtuales pero también presenciales algunos días de la semana.
“Por un lado está la parte académica. Como profesionales, nosotros quizás podíamos atender un poco esa parte, pero jamás con el nivel y la calidad que les dan los docentes a nuestros hijos. Y después está la salud mental. De verdad, los que pudieron volver a las aulas en formato híbrido, aunque sea por unas horas, demostraron muchas más ganas de despertarse, de bañarse, de peinarse, están de vuelta jugando, cantando, demostrando que por dentro vuelve a crecer un entusiasmo en ellos. Es una esperanza para ellos y ninguno de nosotros tiene las agallas para decirles a sus hijos que ya no podrán ir al colegio porque el Gobierno decidió que no”, detalló Allen.
La mamá, preocupada, dijo que toman como ejemplo el gobierno francés, que ante la pandemia de COVID-19 “decidió cerrar todo lo necesario antes que cerrar las aulas. Por más lejos que estemos de Francia, creemos que sí sirve la experiencia y nos da el argumento sólido para decir que no hay que castigar la educación de los chicos. Por otro lado, psiquiatras en Chile manifestaron que hoy la epidemia puede ser por el coronavirus, pero en cinco años vamos a tener una epidemia de salud mental si no atendemos a los chicos. Volver a las aulas les da una relación socioafectiva necesaria, vital, tanto como la salud respiratoria”, expresó.
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“Un gobierno responsable debería poner sus prioridades en orden. Pensemos qué queremos en 20 años: ¿Los chicos en aula o los chicos en bares? ¿Qué mensaje les estamos dando? Los chicos sienten dolor en la posibilidad de no poder ir a la escuela, miedo que digan que se cierra por 15 días, pero todos sabemos lo que pasó el año pasado, que eso se extendió por todo el año”, dijo la mamá preocupada.
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Para Allen y los demás padres autoconvocados, “en escuelas y colegios se da una situación de convivencia sistémica, donde es muy fácil aplicar un protocolo sanitario. Y se aplica con perfección el protocolo. En los lugares no sistémicos es donde no se puede controlar el protocolo. No porque los niños sean los más sumisos, les van a dar el manotazo. Con los niños, no. Cierren lo que quieran cerrar, pero con nuestros hijos no se metan. Ese es el mensaje. Los padres estamos seguros que estamos peleando por un derecho que nos garantiza la Constitución Nacional”.
Convocatoria
En Asunción, la convocatoria es para las 18:00, frente al BCP. Desde allí la caravana irá hasta la Costanera y luego hasta la sede del Ministerio de Educación y Ciencias (MEC). Allen pidió que la gente vaya con vestimenta, globos y carteles amarillos y que también tenga en cuenta su grupo familiar, o sea, en sus propios autos, motos o camionetas, sin mantener contacto con otros núcleos. “Hay mochilas cargadas de ilusión que otra vez tenemos que tirar en una esquina. No hay derecho. Hay otras cosas por las que empezar a poner orden”, clamó Allen.
La movilización es para que todas las instituciones permanezcan con las aulas abiertas, tanto las privadas como las públicas. Desde el Gobierno se determinó por decreto que desde este jueves hasta que finalice la Semana Santa, colegios y escuelas públicos y privados suspenderán las clases presenciales en 24 municipios en alerta roja por el aumento de casos de COVID-19.
Sin embargo, el ministro de Educación, Juan Manuel Brunetti, dijo a ABC Cardinal que podría modificarse el decreto y darse que las instituciones educativas privadas puedan continuar con la educación presencial. En el sector oficial, los gremios docentes insisten en la suspensión de las clases en aula, alegando falta de infraestructura y de insumos para garantizar el cumplimiento del protocolo sanitario.
Luchan por todos
Verónica Pineda, representante de las madres de alumnos, comentó que la lucha no es solo por los chicos de las escuelas privadas o públicas, sino que por todos los niños sin diferencias.
Comentó que la caravana será absolutamente pacífica, y el único pedido que harán es que no cierren las escuelas. Aseguró que cumplirán con todas las medidas sanitarias, desde el uso del tapabocas hasta evitar la aglomeración. Las familias acudirán en camionetas y estarán en contacto solo con sus burbujas.
Los niños también estarán presentes en la movilización, con banderas y carteles. “Seremos las voces de esos papás que tal vez no pueden manifestarse”, señaló Verónica Pineda.
Lamentó que hasta el momento no tienen contacto con el ministro de Educación. Esperan que después de la medida de fuerza alguna autoridad del MEC se comunique con ellos.