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En conferencia de prensa desarrollada anoche, voceros del presidente de la República, Mario Abdo Benítez, anunciaron nuevas restricciones, siendo el principal la prohibición de circular de 20:00 a 05:00, lo cual afectará a miles de empresas, que hoy –a un año de la pandemia– siquiera logran operar normalmente. El anuncio sorprendió a los empresarios y sus voceros gremiales cuestionaron que la decisión no fue acordada pese a que el sector privado es el responsable de soportar la carga de pagos de impuestos y dar dinamismo a la economía.
“Con esta medida, algunas empresas van a estar con facturación cero. El Gobierno improvisa al decir vamos a hablar mañana (con los empresarios). Cómo vamos a hablar mañana tratándose de la fuente de trabajo del miles de paraguayos, no hay una propuesta previa, se repite el error de hace un año”, cuestionó Bruno Defelippe, presidente de la Asociación de Emprendedores del Paraguay (Asepy). Agregó que nuevamente se le pide un sacrificio al sector privado y no se ve que el Estado haga un esfuerzo de su parte en achicar los gastos.
Defelippe reflexionó que ante el hecho de que el sector formal no recibió una propuesta previa y las declaraciones de las autoridades desnudan que no existe un plan de Gobierno para hacer frente a la nueva medida, que en términos prácticos, es una nueva cuarentena total. Cuestionó que aún teniendo la experiencia de marzo del año pasado no hubo una estrategia para hacer frente a los masivos contagios, escenario que “ya se veía venir”.
Oliver Gayet, titular de la Asociación de Restaurantes, mencionó que en las conversaciones mantenidas en las últimas semanas en la mesa de diálogo, el Gobierno siquiera insinuó las medidas comunicadas anoche. “Arde Troya. No sabíamos nada, no sabíamos del subsidio que se dijo en la conferencia ni si podremos trabajar con delivery, y si es así, si se garantizan buses para nuestro personal. Estamos como hace un año atrás, era una incertidumbre feroz”, lamentó el vocero.
Si bien aclaró que existe una crisis sanitaria, también es una realidad la económica, y con esta medida, miles de personas podrían quedar sin empleo. “La restricción a partir de las 20:00 para nosotros significa el 80% de ingresos menos”, dijo, y confesó que teme que la medida aliente a las actividades clandestinas y, nuevamente, signifique un castigo para el sector formal.
“Estamos en la quiebra”
“Hay mucho nerviosismo en mi gremio, están hablando de una manifestación y no temen nada porque no tenemos nada, estamos en la quiebra. Otra vez nos discriminan con la restricción horaria”, afirmó anoche la presidenta de la Asociación de Empresas Paraguayas Proveedoras para Eventos (Aseppe), Sonia Cáceres. Indicó que la medida es igual a nada si es que no se aplica control y nuevamente significará el quiebre de empresas y que miles de compatriotas queden desempleados. “El Ministerio de Salud ya sabía que en marzo se daría la segunda ola y con esto no demuestra la improvisación total con el que se maneja”, criticó.