Roban imagen de Ángel Atlante de 414 años de un oratorio de Caazapá

Desconocidos hurtaron la imagen del Ángel Atlante, tallada en la época de la evangelización franciscana, hace más de 400 años. Formaba parte del retablo del oratorio San Roque, ubicado en el cementerio de Caazapá. Ocurrió casi 10 años después del robo de la imagen de San Roque, que no fue recuperada.

Afiche con la imagen del Ángel Atlante robada.
Afiche con la imagen del Ángel Atlante robada.

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CAAZAPÁ (Antonio Caballero, corresponsal). La encargada del cuidado del oratorio San Roque y del cementerio, Genara Ávalos, relató que se percató de la ausencia de la imagen del Ángel Atlante el lunes cuando ingresó para preparar el altar para un responso. Agregó que no podía precisar en qué momento robaron la imagen, debido a que el oratorio permanece abierto todos los días y recibe visitas diariamente.

La mujer explicó que no todos los visitantes son personas con buenas intenciones y que también en horas de la noche entran jóvenes para tomar bebidas alcohólicas o para fumar marihuana y otras actividades indebidas.

La presidenta de la Asociación Museo Fray Juan Bernardo de Caazapá, Miriam Dávalos, lamentó el nuevo caso de robo de imagen del retablo del oratorio San Roque, ubicado en el cementerio. La misma explicó que la imagen es un “Atlante de madera policromada, en bajo relieve, en forma de ángel, que estaba en la predela, lado derecho del retablo del oratorio San Roque”.

Explicó que la imagen del Ángel Atlante robada mide 30 cm de alto y 22 cm de ancho. Data del siglo XVII y el retablo con cuatro predelas (plataforma sobre la que se asienta un altar) es el único de la época de los franciscanos que se conserva en el Río de la Plata.

Según los datos, la imagen de San Roque fue robada el 28 de abril del año 2011 y continúa con paradero desconocido. Dávalos dijo que es difícil la recuperación de las imágenes porque los investigadores no ponen empeño en su trabajo.

Además, los autores de los hurtos de estas reliquias no dimensionan el daño causado al patrimonio cultural y religioso al cometer este tipo de delitos.

Estas reliquias robadas comúnmente terminan en posesión de coleccionistas del extranjero o de nuestro país.

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