No logran aplacar descontento ante la falta de medicamentos

La carencia se agrava en los hospitales mientras crece el mercado negro de la medicina. Salud dice que es responsabilidad del Estado y que se están buscando los mecanismos para resarcir los millonarios gastos en UTI.

El viceministro Julio Rolón escuchó la suplicas de los familiares que ya no saben cómo afrontar los gastos de internación.
El viceministro Julio Rolón escuchó la suplicas de los familiares que ya no saben cómo afrontar los gastos de internación.

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Momentos de tensión en medio de fuertes reclamos se vivieron ayer en el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias y del Ambiente (Ineram) cuando el viceministro de Salud, doctor Julio Rolón, llegó hasta el nosocomio para intentar dar respuesta sobre la falta de fármacos.

Tanto en los hospitales públicos como en el Instituto de Previsión Social (IPS) la carencia se agrava, principalmente por la falta de atracurio y midazolam, utilizados en grandes dosis por pacientes internados en terapia intensiva. Los afectados exigen soluciones por parte del Ministerio de Salud Pública (MSPyBS) y del Gobierno Nacional, reclamo al que se sumó el personal de salud que decidió salir a las calles en casi todo el país para demandar soluciones.

En un intento de aplacar los ánimos y hacer promesas, Rolón aseguró que “no hay forma de justificar” pero se van a encontrar los mecanismos para resarcir los gastos. Los afectados sin embargo mostraron su descontento y con exclamaciones de sufrimiento relataron al representante de la cartera sanitaria la apremiante y dolorosa situación por la que atraviesan.

“Ya vendimos hasta lo que no tenemos, ya no sabemos qué hacer señor viceministro. Necesitamos una respuesta, una solución”, reclamaron los afectados que hablan de gastos millonarios que incluso superan los G. 60.000.000.

En medio de lágrimas y pedidos de ayuda, alegaron que la ciudadanía no necesita de más funcionarios de oficina que ni siquiera tienen conocimiento de lo que sucede en los hospitales.

Los familiares apostados día y noche frente al nosocomio, velando por sus enfermos, relataron también que ante la desesperación incluso ya recurrieron a la compra de fármacos de uso exclusivo de Salud Pública, del Instituto de Previsión Social (IPS) y del Hospital de Clínicas. Según relataron al viceministro, adquieren estas ampollas en plena vía pública. Reconocieron que no está bien, pero que la necesidad los obliga a acudir a cualquier salida con tal de mantener vivos a sus familiares.

“Nadie está preparado para esto, pero no hay forma de justificar. Lo único que puedo hacer es comprometerme a una solución. Suena una vez más a discurso, pero no hay otra alternativa. Es responsabilidad del Estado. Es inadmisible que una persona gaste millones y tenga que pasar por estas condiciones”, expresó Rolón en medio del llanto de quienes desde hace días claman soluciones.

El viceministro dijo que por el momento, se logró un lote de 30.000 ampollas de atracurio y a partir del fin de semana, 300.000 dosis de midazolam.

En medio de la desesperanza, en el Ineram se sintió también la solidaridad del pueblo paraguayo. Ayer, los Bomberos Voluntarios de Trinidad, llegaron hasta el nosocomio con dos camiones cargados de insumos básicos, medicamentos, agua y alimentos, en tanto que la Pastoral Social Arquidiocesana anunció que gestiona la entrega de fármacos para Ineram y que además proveerá de almuerzos a los familiares apostados frente al hospital. Para apoyar la causa se puede llamar a (021) 225-201.

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